Bolivia y los nuevos analisis de America Latina
Bolivia parece un pais pequeno, y si lo miramos segun el mapa convencional de los poderes invasores de nuestra Pachamama, se ve un Liliput. Pocas veces paises tan pequenos se habian visto tan grandes. Chiapas era una region que nadie habia visto en ningun diario, pero la fuerza telurica emanada de la decision de los pueblos por romper las cadenas ha irrumpido dando vuelta al planeta. Arauco y Malleco son dos regiones del Wallmapu -territorio mapuche- donde la recuperacion de tierras se practica a pesar del regreso de la represion dictatorial. Areas pequenas de proyeccion gigante.
Las miradas convencionales hacia Abya Yala (Tierra Fertil, Tierra Generosa, es su nombre, y no America) veian que en Brasil el MST ocupaba tierras en todo el territorio y se produjo el entusiasmo, luego poco a poco se fue viendo que se trataba solo de algunos latifundios que fueron siendo atados a las practicas reformistas. Los campamentos y asentamientos del MST fueron organizados verticalmente y llevados con rigida disciplina a participar en la farsa electoral donde la socialdemocracia hoy exibe a Lula como una victoria de la lucha de los pueblos, y despues de todo ello, subiendose en los hombros del pueblo pobre amarrado y manipulado por las organizaciones autoritarias, Lula va a Davos a negociar migajas para los miserables, asegurando el predominio empresarial y la mansedumbre de los oprimidos. Y a eso le ponen cara de que es lucha popular.
Argentina mostro que la lucha podia y debia tener otros destinos, no necesariamente arrastrar el movimiento popular de vuelta hacia las instituciones, sino proyectarse como una nueva sociedad desde abajo, al igual que venian y vienen planteando los zapatistas.
Diversas otras experiencias continentales muestran variantes y niveles de esta pugna de los pueblos por avanzar y de ciertos grupos organizados que se introducen en las masas buscando devolverlas a las filas y a las mesas de las negociaciones y conciliaciones.
En Bolivia la cosa esta que arde. Desde que los cocaleros empezaron sus grandes marchas hace casi una decada, poca o ninguna atencion le prestaba la izquierda tradicional, asi como cuando aparece y actua el Ejercito Guerrillero Tupak Katari. La decada de los noventa, fue muy intensa en este proceso de reconstruccion de la capacidad popular de realizarse como actor social. Ya pasadas las epocas de la poderosa COB, cuya base eran las minas estatales, la atomizacion de los trabajadores mineros y urbanos fue en aumento. Muchos cuadros mineros y de las experiencias de izquierda mas avanzadas, se incorporan por cuestion de sobrevivencia a las nuevas luchas por la tierra. No es casualidad que las marchas cocaleras se parezcan a las marchas de los canheros en Uruguay de los cuales nace la insurgencia tupamara. No es casualidad que la migracion de obreros y cuadros honestos de izquierda hacia las periferias, el campo y regiones de comunidades originarias haya producido una simbiosis que esta creando nuevas modalidades de entender y actuar la lucha. Eso se verifica en los desempleados argentinos, en Chiapas y tambien hoy en Bolivia, no asi en los brasileros, que fueron al campo a reproducir las formas organizativas de la vieja izquierda, lo que solo ha traido agua al molino de las salidas institucionales de acuerdos con el capital. Como siempre.
Bolivia, siendo un pais pequeno ocupa parte del Tawantinsuyu el territorio de las comunidades quechuas, aymaras y otras, por lo que la lucha esta haciendo estremecer a toda la region. En Argentina los inmigrantes bolivianos se encuentran en efervescencia, y se cuentan por miles, se reunen para discutir la situacion y se plantean acciones como marchas a la embajada de su pais. En el oriente boliviano, fronterizo con Brasil, Paraguay y Argentina, las comunidades guaranies, tupi-guaranies y otras se extienden por todas esa region, por lo que la vibracion recorre y entrelaza las dinamicas y contradicciones que hay en cada lugar. En Paraguay existe un importante proceso de reconstruccion de la identidad guarani, en casos, tristemente con la presencia de destacamentos de la vieja izquierda con sus vicios. En Argentina los indicadores son diferentes: Diversas comunidades originarias levantan la idea de la autonomia y hay un crecimiento evidente en este terreno. En el norte de los territorios ocupados por el estado chileno las comunidades aymaras han comenzado a entrecruzarse con sus hermanos de Bolivia y del Peru, y este ultimo pais ha sido testigo de movilizaciones que un autor acaba de destacar en La Haine.
La solidez del andar del pueblo argentino y la continuidad de la rebeldia boliviana pueden en un plazo corto introducir nuevas modificaciones en el terreno de los actores sociales de toda la region. Habra que mantener la atencion sobre la dinamica de lucha autonoma por abajo en Paraguay, donde se vienen en abril las elecciones, y en Peru. Paraguay es hoy el terreno de disputa de tres sectores, el capital con el ejercito a su lado, la izquierda tradicional que ha constituido un fuerte bloque popular para las elecciones y la lucha autonoma de base, que no tiene la misma capacidad que existe en Argentina. La crisis de estado que vive ese pais ha llevado a las masas a perder la credibilidad en las instituciones y los brasileros del PT y del MST se encuentran dando apoyo a la salida electoral, al igual que la CTA y Correos de la Emancipacion de Argentina, de Attac ni hablamos, pues son los principales interesados. El Forro de Porto Alegre, el Forro de Sao Paulo y otras instancias de la vieja izquierda han neutralizado en parte la capacidad de los autonomos para extender y entrelazar sus movilizaciones a nivel regional, envolviendolos en dialogos y mesas mientras la artilleria pesada se concentra en Paraguay reforzando la salida electoral. Estamos ciertos de que la campanha por la abstencion, aun incipiente, tiene un buen terreno de expansion.
Hoy las condiciones son diferentes. Durante largos anhos, la izquierda revolucionaria, el anarquismo y la autonomia, fueron arrinconados por el predominio del reformismo etapista. Luego fue una epoca de expansion de las ideas revolucionarias que no consiguio envolver a las grandes masas por el caracter aparatista y vertical de sus organicas. Hoy las masas toman la iniciativa y esta el terreno propicio para avanzar en la unidad en la accion entre marxistas revolucionarios, anarquistas, situacionistas, autonomos y comunidades originarias, con la condicion de dejar los vicios y practicas anteriores y disponerse a aprender de la creatividad e iniciativa del ser social en reconstruccion como sujeto real de la historia, ya no mas los viejos intelectuales colectivos.
La resistencia viene de abajo, de la Pachamama, no de las ideas.
Abrazos.
Profesor J