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Cinco nuevos desalojos de casas okupadas en Barcelona
Ilan Shalif.- La Masia Malaherba, les Bruixes y la casa de Cros, todas en el barrio de Sants, desalojadas el dia 14 de noviembre. El día siguiente 11 detenciones en dos casas del Guinardó.
A las 8 de la mañana del miércoles 14 se había convocado una concentración delante de la masia okupada Malaherba en la calle Sugrañes 17 para protestar por el desalojo de esta antigua granja construida antes de 1830 y que un colectivo de jóvenes del barrio había okupado hace más de dos años para rehabilitarla despues de muchos años de estar abandonada. A las 9:30 , más de 20 dotaciones de antidisturbios tomaron el barrio, cortando la circulación en las calles principales, no permitieron el paso ni a vecin@s ni a solidari@s que estuvieron presentes todo el rato en lugares cercanos a la casa desalojada. En breves momentos empezó una fuerte carga policial que disolvió la concentración, provocando diversos heridos y una hospitalizada.
Así empezaba un desalojo que se prolongaría durante casi 5 horas debido a que había 19 personas que ofrecian resistencia a las fuerzas de la autoridad, encadenandose a la puerta, vigas, colgándose en la fachada, encementándose o subiéndose a los árboles. El desalojo requirió la presencia de cuerpos especiales de la policía debido a la negativa de los bomberos a colaborar activamente. Mientras esto sucedía la policía aprovechó que las miradas estaban concentradas en el desalojo de la masía para efectuar el desalojo de dos casas mas, las Bruixes i Cros 11, en las que no se pudo ofrecer ningun tipo de resistencia. Esto se debe a que la prepotencia habitual de los poderes les permite proceder sin haber notificado previamente ni la existencia de un proceso legal contra la casa ni la orden de desalojo. Afortunadamente no se produjo ninguna detención, pero se identificó a todas las personas que había en las casas.
Después del desalojo se produjeron varios actos de protesta que fueron fuertemente controlados por las fuerzas de seguridad. El mismo miércoles a las 19h se concentraban unas 150 personas en la plaza de Sants pero la concentración no pudo transcurrir tranquilamente ya que la policía volvía a desplegar un impresionante dispositivo amenazando a las personas concentradas en una actuacion brutal contra la libertad de expresion.
El viernes 16 se convocaba una manifestación para denunciar la especulación, los desalojos, la falta de libertad de expresión y la destrucción del poco patrimonio historico que el capitalismo aun no ha derribado. La manifestación, de unas 500 personas, recorrió todas las casas desalojadas y se desplegaron varias pancartas denunciando los hechos, denunciando la amenaza de desalojo de la Torreta y la posible deportación de unas personas que habian desalojado en el Guinardó. Una vez llegados a la Mala Herba se pudo ver lo que hacen con una masía de más de 200 años una vez que cae en las manos de las constructoras, la masía había sido destrozada por dentro, a pesar de que la empresa propietaria, MCA 1992, no tenía licencia de derribo. En esos momentos se improvisó un entierro con la encendida de centenares de velas alrededor de lo que era una de las pocos testimonios de las raíces del barrio.
Después que el miércoles desalojasen 3 casas en el barrio de Sants, el jueves fue el turno del Guinardó, donde la policía desalojó sin previo aviso 2 casas, dejando sin vivienda a más de 15 personas. Once de ellas fueron detenidas y llevadas a la comisaría de la Verneda en aplicación de la ley de extranjería, al ser extracomunitarias y no tener los papeles en regla. Muchas de ellas ya hace tiempo que viven entre nosotr@s, mucho antes de la entrada en vigor de esta ley de privilegios.
Al cabo de unas horas, 10 de ellas fueron dejadas en libertad y un chico de nacionalidad polaca fue encerrado en el centro de internamiento. Las primeras tienen propuesta de expulsión, con la posibilidad de presentar un recurso. Si este no es aceptado se tendrán que enfrentar no tan solo a la expulsión sino a graves represalias en sus países de origen según los represivos tratados internacionales. En el segundo caso el afectado podría pasarse hasta 40 dias en régimen de internamiento en las inhumanas condiciones, ya largamente denunciadas, que se estilan en los bajos de esta comisaría-cárcel, antes de ser expulsado del pais.
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Kolectivo
La Haine
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