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La Huelga General: Discurso y realidad
x Inés Arcia
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El diario "independiente" de la mañana
nos despierta con una frase histórica de Aznar: "El estado
de bienestar no está para ayudar a quien no busca empleo".
En efecto, el estado, el de bienestar y el de malestar, sólo están
para mantener a las empresas, a los políticos y a los burócratas.
¿Cómo? Traspasando a la empresa privada y sus representantes
las rentas de los trabajadores, acumuladas con contrato indefinido o a
tiempo parcial, con titulo universitario o con el graduado escolar por
todos nosotros, los pardillos de turno. Como pequeño ejemplo está
los 11.9 millones que el Ayuntamiento dará a Ferrovial, Fomentos
y Contratas y Sufi-Setex para poner 1.050 parquímetros, que instalarán
en Madrid "la gente que busca empleo" subcontratados por un
salario y con unas condiciones de trabajo infinitamente inferiores a las
que se reservarán los ejecutivos de las empresas. Todo pagado con
nuestro dinero, del que se apropian los políticos por esto de la
democracia representativa. Como siempre.
La ofensiva globalizadora no para. Todos los días aparecen con
algo nuevo, quitándonos algún derecho, obligándonos
a la resignación, acorralándonos. La última es la
nueva ley de desempleo. A pesar que del total de parados, solo el 40%
está cobrando algún tipo de subsidio, la mitad cobra menos
de 4 meses, solo el 3% cobra 24 meses y de los que tienen derechos a más
de un año de prestación, solo el 15% agota la prestación,
los políticos no están contentos. Nada, a morirse de asco
una vez que te echan del trabajo. Porque como ellos dicen "el empresario
tiene que poder contratar cuando necesita y despedir cuando no necesita".
Es decir, que en una sociedad de consumo, en la que se supone que lo que
hay que hacer es consumir, nosotros sólo podemos consumir salteado,
dependiendo de lo que necesite el empresario.
Por lo visto estamos ante lo que será la tónica de este
siglo 21 en los países desarrollados, porque eso viene siendo así
desde hace mucho en el resto del mundo. Ventajas de la globalización.
Sin embargo, hay una novedad y es los sindicatos mayoritarios llaman
a la huelga. ¡Tanto tiempo siendo uña y carne con las "instituciones
representativas" y en esta oportunidad no los han invitado a negociar,
haciéndoles perder el vino y el jamón de la mesa de la Moncloa!
Esta vez el gobierno omitió la habitual palmadita en la espalda
a Méndez y a Fidalgo, algo imprescindible si quiere seguir teniendo
el apoyo incondicional de la burocracia.
La derecha española ya no tiene necesidad de suplicarle a los
burócratas (tan horteras ellos...), visto el apoyo que tiene de
la burguesía española, europea y mundial, con el PP, su
partido en el gobierno y el PSOE, su partido de recambio haciendo de oposición
de izquierdas.
El 19 de junio hay huelga general convocada por la burocracia de UGT
y Comisiones Obreras. Una huelga convocada sólo contra la ley de
desempleo y no contra este sistema de estafa, de vuelta de la sociedad
al siglo XIX. Una huelga convocada para poder negociar sobre lo que no
hay nada que negociar. La consigna debería ser "Ni un paso
atrás, no pasaran, otro mundo es posible".
Pero no será así porque para eso los trabajadores, los
parados, los inmigrantes de este país deberíamos estar organizados,
sabiendo muy bien quiénes son nuestros amigos y nuestros enemigos.
La huelga se hará y seguramente será capitalizada por la
burocracia, que podrá sentarse a negociar tan a gusto. Sin embargo,
la huelga general sigue siendo un instrumento legitimo para manifestar
toda la bronca que están sintiendo los trabajadores, y ellos lo
saben. Aunque nosotros no tengamos la fuerza necesaria para evitar la
negociación, podemos aprovechar este espacio de debate que se abre.
Tenemos que ir a la huelga aunque más no sea que para decir Basta.
Tenemos que debatir con los trabajadores y los parados de este país
todo lo que está pasando. Dentro de nada habrá elecciones
y ¿qué pasara? ¿Haremos como en Francia, como en
Argentina, que la izquierda no es capaz siquiera de transmitir una propuesta
creíble? ¿Fomentaremos la abstención, para que gobierne
la derecha de la derecha o la izquierda de la derecha?
Tenemos que salir de la red y bajar a la calle. Tenemos que llevar el
debate a la puerta de la empresa, a la parada de metro y de autobús,
a la puerta de los supermercados, a las escuelas, a la universidad. No
podemos quedarnos con que "lo que no sale en la tele no existe",
porque nosotros existimos y no vamos a salir en la tele.
VIVA LA HUELGA GENERAL - NO A LA NEGOCIACIÓN - FUERA LOS POLÍTICOS
Y LOS BUROCRATAS.
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