Las "rebeliones" de Diego Valderas

Miren ustedes por dónde, tan pocas nueces para tanto ruido. Resulta que el hoy flamante vicepresidente de la Junta de Andalucía y ex coordinador de Izquierda Unida en la misma comunidad, Diego Valderas, llamó al pueblo andaluz a la "rebelión" contra el bipartidismo del PP y del PSOE para luego quedarse donde se ha quedado.

En el curso de la campaña electoral pasada, Diego Valderas quiso hacerles creer a los asalariados andaluces que si lo apoyaban con sus votos, él mismo se encargaría de organizar en Andalucía una "rebelión" que acabaría con tantos siglos de explotación a la que ha estado sometido su pueblo.

Pero bastó que el lindo don Diego alcanzara un acuerdo en el reparto de poltronas con el PSOE, para que aquellos efluvios revolucionarios del demiurgico Valderas se evaporarán como por arte de ensalmo. Donde dije digo, digo Diego, le espetó de un dia para otro Valderas a su expectante electorado. Comenzó por aceptar las órdenes tajantes provenientes del gabinete de Mariano Rajoy, de que la Junta de Andalucía procediera al despido masivo de asalariados.Lo hizo, claro "por imperativo legal, el mismo argumento, por cierto, que utiliza Rajoy para aceptar las ordenes que emite Berlín .

Por si fuera poco, después de utilizar como banderín de enganche electoral las inmensas corruptelas de los socialdemócratas del PSOE, Valderas volvió a repetir aquello de "donde dije digo, digo Diego" y se conchabó de nuevo con los psocialistas en un contubernio de complicidades y silencios para que la basura acumulada por el PSOE no viera la luz.

Ahora, el lindo Valderas se ha unido a un "Frente Común" integrado por las Comunidades Autónomas de Catalunya, Andalucía, Asturias y Canarias para rechazar la reforma local del PP. Esta "Santa Alianza" considera que el proyecto de reforma local de los ultramontanos del PP es un "recorte en la democracia" y una invasión de sus competencias autonómicas. Y, "rebeliones" aparte, los regionalistas están dispuestos a llegar juntos, no a las armas, faltaría más, pero si al Tribunal Constitucional para defender lo que consideran su exclusivo predio.

Como puede apreciarse en la foto que adjunto, el que representa a los canarios en ese Frente Común" para defender lo nuestro, es nada menos que el consejero del gobierno autónomo del Archipiélago, Francisco Hernández Spínola, todo un socialdemócrata de pro que no se ha rebelado nunca siquiera contra las moscas que se posan en su sopa.

En esta ocasión "el Frente" no ha logrado siquiera la más insignificante adhesión de los ciudadanos de a pie. Sus "reivindicaciones autonomistas" han chocado con el más absoluto desinterés de la ciudadanía cuyas instituciones locales, pese a la cercanía física , están a miles de kilómetros de sus más sentidas necesidades. Y es que ya todo el mundo es conocedor por estas y otras latitudes, que la administración local son una palanca que los caciques, los clanes locales y las mafias utilizan como instrumento para la facilitar sus corruptos negocios.