Las ruinas de la izquierda
Para los revolucionarios del Estado español la reconstrucción de la izquierda debería ser un objetivo prioritario.
Si queremos tomar el poder y llevar a cabo una revolución, debemos dotarnos de los elementos organizativos necesarios para tal fin.
Cuando miles de personas caminan juntas por la República y contra la monarquía, defienden a Cuba o a la izquierda abertzale; cuando caminan miles de personas, desde Valencia hasta Euskal Herria, en Salamanca o en Madrid; cuando miles plantan cara a la Unión Europea y su proyecto imperialista, o se solidarizan con la KSM, en Barcelona, Asturias o Alicante: cuando miles de personas, desde el País Vasco francés hasta las islas Canarias, comparten sueños e ilusiones, las organizaciones revolucionarias deben estar a la altura.
Los jóvenes, los que no nos dividimos con el muro y demás historias y traiciones de la izquierda, tenemos la obligación de acercar nuestras distintas organizaciones para levantar un muro contra el cual se estrelle el régimen capitalista.
Así nos lo enseña la historia, con la victoria de los jornaleros, trabajadores y mujeres en 1936, y así nos lo enseña también el presente, en Venezuela, donde hay en marcha un proceso para unificar los partidos revolucionarios.
Juntos, nuestras fuerzas se multiplicarán. Juntos, seremos más fuertes. Juntos, estaremos preparados para vencer juntos, juntos, juntos ¡juntémonos! ¡Seamos valientes y defendamos la causa revolucionaria por encima de intereses partidistas!