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PP y PSOE reclaman más de 13.000 euros a Futuro Vegetal por una protesta pacifica
PSOE y PP reclaman más de 13.000 euros al grupo ecologista Futuro Vegetal por lanzar témpera al agua a sus sedes.
Represión al movimiento ecologista: PP y PSOE reclaman más de 13.000 euros a Futuro Vegetal por una protesta pacifica
PP y PSOE han reclamado más de 13.000 euros a Futuro Vegetal por unos actos de protesta pacífica el pasado mes de abril en los que lanzaron témpera al agua en sus sedes. Continúa la represión contra los activistas ecologistas.
PSOE y PP reclaman más de 13.000 euros al grupo ecologista Futuro Vegetal por lanzar témpera al agua a sus sedes. El colectivo denuncia un nuevo intento de represión y censura ante una forma de protesta pacifica y reconocida por Naciones Unidas. Según Futuro Vegetal, la forma de protesta era legítima y no suponía los problemas que reclaman PP y PSOE al reclamar dicha cantidad de dinero.
Cincos activistas de Futuro Vegetal han sido acusadas de lanzar témpera al agua sobre las sedes del PSOE y PP, una protesta pacifica por la que el PSOE y PP exigen 13.276 euros a las activistas. Una cantidad desmesurada en comparación con los costes reales de limpieza de las sedes y que busca según el grupo ecologista amedrentar y dificultar la protesta.
El método de protesta, argumenta Futuro Vegetal, es avalado por Naciones Unidas avala como una acción de desobediencia civil no violenta. Algo que poco importa a los partidos del régimen español que continúan una campaña de criminalización del movimiento ecologista.
Este ataque se suma a golpes anteriores como la detención de activistas de Futuro Vegetal acusados de pertenecer a una organización criminal o la calificación de grupos ecologistas como grupos “terroristas” por parte del Estado español. Desde Izquierda Diario y la CRT enviamos toda nuestra solidaridad a las compañeras y compañeros de Futuro Vegetal. Ante la continuada oleada de represión, es necesario poner en pie un fuerte movimiento ambiental que no tenga ninguna confianza ni en las empresas responsables del calentamiento global ni en los gobiernos cómplices de la crisis, la destrucción de ecosistemas y la persecución al movimiento ecologista.
