Repsol y "sus" reservas
EL TRIUNFO ELECTORAL de Evo provocó un descenso de 2.31 por ciento en el precio accionario de Repsol (la más pronunciada de la bolsa madrileña) al día siguiente de conocerse los resultados de los comicios en Bolivia, pero la llegada del líder indígena al palacio de gobierno en La Paz y, junto a ella, la primera acción para inscribir en los mercados bursátiles las reservas de gas a nombre del Estado boliviano, reventaron la "estrategia" de la trasnacional.
EL JUEVES, REPSOL ANUNCIO un "recorte" de 25 por ciento en "sus" reservas probadas de petróleo y gas (básicamente en Bolivia y Argentina), y segundos después el precio de sus papeles se desplomó 7.67 por ciento en el mercado bursátil de la capital española y 8.51 por ciento en el de Buenos Aires (los mayores descensos de los últimos cuatro años), lo que se traduce, de acuerdo con analistas de esas plazas financieras, en una pérdida de valor bursátil cercana a 3 mil 300 millones de dólares, y no fue mayor porque, en vía de mientras, la cotización de los títulos de la trasnacional fueron suspendidos a petición de la propia empresa.
REPSOL RECIBE UNA sopa de su propio chocolate, porque no le resultó suficiente saquear los energéticos bolivianos y al erario de ese país, sino que se le hizo fácil inscribir en la Bolsa de Valores de Nueva York como propias, las reservas de gas bolivianas y el proceso de producción de hidrocarburos, lo que incrementó sustancial, ilegal y fraudulentamente el precio de sus acciones (de 10 a 30 dólares), así como sus balances financieros.
ANTES DE CONVERTIRSE en ministro boliviano de Hidrocarburos, con el gobierno de Evo, Andrés Soliz Rada denunció el ilegal proceder de Repsol, pero ninguna de las autoridades responsables se animó a revertir dicho registro. "Se ha podido comprobar que mediante el decreto 24.806 las petroleras afirmaban que eran dueñas de los hidrocarburos cuando salían en boca de pozo, y nunca se discutía la propiedad de los yacimientos, porque en los yacimientos están las reservas, y las reservas que tiene Repsol-YPF en Bolivia están en los campos San Alberto y Margarita; esas reservas se encuentran en suelo boliviano y están anotadas en la Bolsa de Valores de Nueva York como si fueran de la trasnacional española, sin que se hayan cumplido los requisitos que establecen las normas internacionales; es decir, tener un contrato de venta del gas o un mercado asegurado. Existe omisión de la Superintendencia de Hidrocarburos que debería advertir al país el daño que se le está haciendo. Repsol-YPF estaba desesperada porque se firme el contrato con la LNG Pacific, sin importar que se ejecute en 50 años, debido a que el objetivo era asegurarse la anotación de las reservas en la Bolsa de Valores de Nueva York, pero como el contrato no se suscribió, esa anotación en Estados Unidos se llama un fraude fiscal y en Bolivia sería una especie de estelionato, es decir, vender una propiedad que no es suya".
ESA FUE LA DENUNCIA del ahora ministro boliviano de Hidrocarburos, pero nadie le hizo caso. Ahora el gobierno de Evo Morales procede en consecuencia y Repsol se ha visto en la penosa necesidad de reducir "sus" reservas en 25 por ciento, lo que de inmediato provocó -amén del efecto en el balance económico y el desplome en el precio accionario- una reconsideración de la calificadora internacional Standard and Poor's, que redujo de "estable" a "negativo" el panorama financiero de la trasnacional.
EL PRESIDENTE DE Repsol, Antonio Brufau, anunció la caída de mil 254 millones de barriles equivalentes de petróleo (BEP) de "sus" reservas probadas, fundamentalmente de gas. La mayoría de ellas se refieren a Bolivia (52 por ciento) y Argentina (41 por ciento), junto con menores cantidades en Venezuela y otras áreas en las que opera la trasnacional. Las revisiones a la baja, reconoció, se derivan principalmente de la modificación del régimen legal aplicable en Bolivia, tras la promulgación de la nueva Ley de Hidrocarburos, y "de un mayor conocimiento de ciertos campos en este país y en Argentina". Se espera que ello ocasione revisiones de la valoración de activos por importe inferior a 50 millones de euros en 2005 y 170 millones en 2006.
ESE 52 POR CIENTO de "sus" reservas en Bolivia equivalen a 659 millones de barriles equivalentes de petróleo, aunque Brufau aseguró que la reducción no es producto de la ilegal inscripción en la bolsa neoyorquina, sino derivada de "la nueva Ley de Hidrocarburos que ha creado incertidumbre sobre la viabilidad comercial de algunos proyectos, al tiempo que ha hecho que otros dejen de ser rentables".
LA REIVINDICACION del nuevo gobierno boliviano pegó directo en la zona hepática de Repsol, y como no existe trasnacional chantajista, Brufau, ahora sí preocupado por el estado de derecho, advirtió: "la empresa mantiene en suspenso las inversiones previstas en Bolivia por 400 millones de euros; como aún no tuvo lugar la promulgación de la Ley de Hidrocarburos, a la que se tienen que adaptar los contratos existentes con el Estado boliviano, en estos momentos no existe seguridad jurídica, y las inversiones en el sector energético necesitan de un horizonte de 20 años".
EL RECORTE DE "sus" reservas en Argentina suma 509 millones de barriles equivalentes de petróleo, y procede, según Repsol, porque "no existe certeza razonable sobre la renovación de esas concesiones", mismas que otorga el Estado, por mucho que la trasnacional las considere propias.
La Jornada