UCE: los “comunistas” que aparecen y desaparecen
Artículo publicado el 31 de mayo de 2017, originalmente en “Llibertat.cat“
Han vuelto a aparecer. Y Xavier Tejedor Rius, de “e-noticies” les da proyección, pese a que sean cuatro y el gato sosteniendo un muro de cartón con el lema “No queremos muros” frente al Palau de la Generalitat, y con la pancarta “Por la unidad del pueblo trabajador. NO a la independencia”.
Habría que observar cuántas noticias más aparecieron en el diario subvencionado de las “bruticias”. Tantas como actos hagan, o tantas como participantes en estas protestas de foto y titular distorsionado. Eso sí, poco observamos a las personas que se manifiestan.
Por la Feria de Abril, el 6 de mayo, convocaron otra concentración-desfilillo o lo que fuera, con los mismos lemas. Y se hizo bajo el paraguas de la “Alternativa Ciudadana Progresista”, una “Asamblea Social”, “Recortes Cero”, y… la UCE.
Carteles con la portada de “De Verdad”, órgano de propaganda de la UCE, en los que se pide el voto para Rosa Díez en las elecciones generales españolas de 2008.
Este grupúsculo, la “Unificación Comunista de España” (UCE), es muy conocido, y entre la militancia política de izquierdas ha sido considerado como una secta, en el mejor de los casos, o como una herramienta de los servicios secretos del Estado y con una estructura sectaria destructiva; algunas fuentes han desgranado su trayectoria con datos y testimonios del traumático paso por este grupo. Por otro lado, ciertas informaciones periodísticas informaron de que el grupo de Atención e Investigación de Socioadicciones (AIS), una entidad patrocinada por el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, la Generalitat de Catalunya y el Ayuntamiento de Barcelona, clasificó a este “partido” como secta.
Lo más preocupante, sin embargo, es el hecho de que este grupo al servicio de no sabemos quién se ha dotado de marcas blancas a nivel estatal para camuflarse o bien crear una sensación de “movimiento diverso”. Ya he citado algunos de los nombres de estos chiringuitos, a los cuales podríamos añadir alguno más como el “Club de los Poetas Vivos”, con logo y todo. Con esta maniobra, y no hace mucho tiempo, consiguieron hacer acopio de firmantes fraudulentos como el cantante Luis Eduardo Aute, o el ex-secretario general del PCE, Francisco Frutos, y muchos otros, para la candidatura “Recortes Cero-Los Verdes” en 2015. Poco antes, en 2014, el “Manifiesto de la Agrupación Electoral Recortes Cero” que se presentaba a las elecciones europeas, recogía una importante suma de firmantes de todo tipo de filiación sindical y política o profesiones (CCOO, UGT, CGT, asociaciones de vecinos…) de todo el Estado Español.
La UCE es un partido autodenominado “maoísta” y legalizado en 1978, proveniente de un opaco grupo denominado “Tribuna Obrera” durante los últimos años del franquismo. En las elecciones de 1977 participaron en la coalición “Frente Democrático de Izquierdas” (FDI), que en Catalunya consistía en la coalición entre el PTE y ERC, y durante aquellos años también festejó con el Movimiento Comunista y Bandera Roja.
Una bandera franquista y otra con simbología comunista comparten espacio en una manifestación españolista, espacio frecuentado por la UCE y sus organizciones paraguas.
Durante la década de 1980 despegaron las siglas UCE en una confusa campaña anti-OTAN al margen del movimiento antimilitarista y de las plataformas de izquierdas. Era la campaña “Ni yankis, ni rusos”, con la recogida de miles de firmas (UCE style), después de la cual desaparecieron del mapa una vez realizado el referéndum sobre la OTAN en 1986. Ya habían hecho su trabajo. Años después apareció puntualmente en momentos de tensión social, como la huelga general de 1988. Posteriormente participaron en las diferentes elecciones generales y autonómicas, bien en solitario o bien infiltrados al costado de IU.
En la década de 1990 la UCE se quita la careta y despliega campañas agitativas de intoxicación contra el movimiento independentista vasco, y especialmente contra la alianza PNV-izquierda abertzale que se produjo en el marco de la tregua de ETA en 1998. Era la cantinela de todo aquello del “nacionalismo étnico” y “Arzalluz nazi-fascista” y “kosovizar Euskadi para balcanizar España”.
En los últimos años han dedicado sus campañas al proceso independentista catalán. Ojo. Ya sabemos cómo las gastan. Solamente hay que recordar el apoyo incondicional de la UCE al partido de Albert Rivera en 2007 y el texto “Seis razones para votar a Ciudadanos”.
No obstante, puede ser, convendría que alguien investigara quién teje la trama del partido-secta-cloaca del Estado. Y cómo se alimentan los enlaces con la prensa que les sobredimensiona, les proyecta y les convierte en arma de demagogia.
Adjunto algunos enlaces sobre estas cuestiones, por si alguien quiere enhebrar el hilo en la aguja de una investigación más minuciosa sobre la UCE. Seguro que en los próximos meses los escucharemos hablar:
Manifiesto “Cataluña somos todos. Tots som Espanya”
“Redistribuir la riqueza, al Parlamento. Recortes Cero”
Información sobre la “Agrupación Electoral Recortes Cero”
“Seis razones para votar a Ciudadanos”
Unificación Comunista de España: “secta maoísta peligrosa”