Las Madres en el Foro Social Mundial de Porto Alegre

x Hebe de Bonafini

Compañeros, estuvimos en Porto Alegre, en el Foro Social Mundial. El Foro tenía entre 60 y 70 mil personas, una cantidad enorme de talleres, personas de todos los países, miles de jóvenes.

El Foro tenía tres estados: el de los que mandan, del que se apoderaron los franceses, con alguno que otro de otros países; luego todos los talleres y seminarios, que hacían los filósofos, los intelectuales, los pensadores; y después toda la gente de más abajo, que también íbamos, nos reuníamos y hablábamos, pero en mucha menor cantidad.

Porque, en realidad, esta vez se hizo más para escuchar, no para que participáramos los de más abajo. No permitieron que viniera Fidel Castro ni las FARC ni tampoco la gente del Subcomandante Marcos. Es una pena. Tampoco las Madres estábamos invitadas. Fueron las cuatro prohibiciones: las FARC, los zapatistas, Fidel y las Madres.

Yo fui igual, porque me invitaron los Sin Tierra y fue muy importante para las Madres estar porque la primer crítica salió de las Madres, que dijimos que no es lo mismo "socialdemocracia" que "socialismo", que la socialdemocracia se había apoderado del Foro, que los franceses pueden venir pero no a mandar, que resulta que el Foro se creó contra la globalización y ahora se hablaba de humanizarla. Una cosa que es totalmente inhumana, que hay que combatirla, que hay que destruirla, eso son los cambios que se vieron.

No se habla más de socialismo. Sí abajo, pero estoy hablando del tema de la estructura, cómo se organizó. Y también no se habla de no pagar la deuda, sino del "cancelamiento". Y para cancelar uno tiene que pedirle al enemigo a ver si se la cancela. En cambio, si no la pago porque no se me canta, no la pago, que es otra cosa. Y eso es lo que planteamos las Madres.

Así es que me tuve que arreglar para hacer los reportajes, porque no teníamos plata, y hacía desde las siete de la mañana reportajes con tres periodistas por hora; a las diez me iba a la PUQUI, que es la Universidad, y ahí seguía. Presenté dos libros muy interesantes que se habían hecho sobre marxismo, socialismo y democracia, y sobre la Comuna de París y del ejemplo que siguió quedando.

La Liga Campesina hizo un homenaje extraordinario para las Madres, una gran cantidad de campesinas se pusieron pañuelos blancos de las Madres y hablaron de nuestra historia, sabían, hablaban en portugués y en español. Después los compañeros paraguayos y chilenos nos cantaron. Y luego, cuando se hizo el acto por Argentina, la gente que lo convocaba me eligió como representante de Argentina, aunque no estaba invitada oficialmente al Foro. Se hizo una marcha contra el ALCA, que fue impresionante.

También tuve el honor de que el grupo organizador me invitara a hablar en nombre de la Argentina, y para las Madres es un honor enorme que en ese lugar, donde había representantes y compañeros muy combativos, como Joao Pedro Stedile, que es dirigente de los Sin Tierra, o compañeros de los sindicatos cubanos, la compañera Blanca Changozo, de Ecuador... Realmente fue un honor para las Madres poder hablar allí, en ese Foro.

Y lo que yo rescaté, porque en el documento se habla de los terrorismos, de "los terrorismos de los pueblos", y siempre los terrorismos... atacando a los pueblos como terroristas, y yo dije que terrorismo es el del Estado, que los levantamientos de los pueblos nunca son terroristas, y que desde ahí pedía la libertad de los presos políticos, porque era muy importante pedirlo, reclamarlo, exigirlo y recalcarlo permanentemente como también el desprocesamiento. Hice todos los demás pedidos que ustedes saben que hacemos las Madres, aclaré que luchamos por el socialismo, dije que a la globalización hay que destruirla y no humanizarla; en fin, dándole un poco vuelta a la estructura oficial del Foro.

Creo que hay que hacer menos talleres, menos intelectuales y más gente del pueblo que hable de sus experiencias, porque en pequeños foros no se puede hablar. Que es muy bueno que hablen, pero sería bueno que estuviera más mezclado: si habla James Petras, que hable un Sin Tierra; si habla Chomsky, que hable uno de las FARC. Porque si no, no sirve, pues las grandes asambleas eran para esa gente. Los demás estábamos en cosas más pequeñas, salvo en mi caso que por suerte me convocaron y pude decir todo lo que quise, pero la otra gente no podía.

Yo vine muy contenta del trabajo que pudimos hacer. Di más de 250 entrevistas a diferentes radios, revistas, etc. Trabajar asentando la posición de muchos, y yo dije que las Madres habíamos tomado esta Plaza hace 25 años, en contra de la dictadura, y que ahora servía para sacar presidentes, y algún día las Madres también la usaríamos para poner a alguien que dirija este país con conciencia y con mucha más autoridad moral que estos mafiosos que tenemos ahora como presidente, porque estamos gobernados por una mafia.

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Discurso de las Madres en Plaza de Mayo
Marcha del Jueves 07-02-02

 
         
   
 

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