Poder municipal
¿Por qué interesa tanto hacerse con los gobiernos municipales a los partidos hegemónicos? al PNV aquí, al PP en el estado y al PSOE en ambos lados. Es fácil de entender si respondemos antes a otra pregunta ¿Quién tiene más poder en un Ayuntamiento; el alcalde o el concejal de obras públicas y urbanismo? Sin duda el concejal. Estos partidos responden al interés de los holdings del cemento o de la agricultura y la ganadería intensiva que defienden los ricos del pueblo y de la ciudad. Están al servicio de las oligarquías a quienes representan. Se trata de detentar el Poder Municipal para manejar el dinero público del que están dotados los consistorios para favorecer y financiar sus negocios. Recalificar terrenos para urbanizar y edificar, adjudicar obras públicas a empresas afines, utilizar los recursos naturales del territorio para su explotación particular, etcétera. Hacer de los Ayuntamientos instrumentos en su propio beneficio. El resto de las políticas locales en materia de servicios sociales, cultura, ocio o deportes son secundarias y políticas de imagen para venderse y convencer de su supuesta vocación de servicio a la vecindad y, ya de paso, también gastar el dinero lucrándose con nuevas infraestructuras y equipamientos deportivos o culturales. El objetivo es construir, echar cemento.
Frente a este Poder Municipal que reproduce el caciquismo y la foto casposa del alcalde, el cura y el terrateniente grande o pequeño, existen por suerte movimientos municipalistas, candidaturas independientes y formaciones políticas que defienden el Poder Municipal como la forma de devolver al pueblo su autonomía, su capacidad de decidir sobre cómo quiere administrar sus recursos. Una opción por democratizar la vida pública, por producir transparencia en la gestión política y poner a los Ayuntamientos al servicio de todos sus habitantes y no de los políticos de turno. Frente a este proyecto tratan de brindarse con sus acuerdos partidos como el PNV, el PP o el PSOE, y lo hacen, aunque tengan que pactar entre ellos o con el diablo.