Rap: El rostro combativo del Hip-Hop (I)

El rap es, sobre todo una subdivisión de lo que se designa como cultura hip-hop, un método de vida cuya música es la parte sumergida del iceberg. O sea el 90% de esa manifestación urbana pero marginal. Además de los DJ que proporcionan las músicas, y de los MC, que se encargan de los textos, el hip-hop agrupa actividades socio-políticas, lúdicas como el dance (break, smurf) plásticas, como la pintura callejera (graffiti, tag), pero también se rige por códigos de indumentaria y comportamientos en extremo desenfadados, de forma mucho más patente en los barrios pobres de las grandes urbes industriales. Hagan clic en "Leer más" para acceder al texto íntegro.

Concebido, en principio, desde, por y para el guetto negro estadounidense, el rap es una música basada sobre todo en una constante innovación, pero que, en principio, se negaba a toda veleidad que supusiera su institucionalización; una música donde la originalidad es un factor determinante para lograr adeptos. Así, para obtener una mínima repercusión en el mercado, era necesario hacerlo con un concepto inédito, un nuevo lenguaje, un nuevo tipo de danza. Ya se sabe que los artistas que basan su carrera en una constante renovación, ante la rápida evolución de la competencia, y en una integridad a toda prueba, son los únicos que se aseguran una bien ganada longevidad artística.

En esta serie de cuatro artículos, me voy a dedicar a señalar, en primer lugar, de forma divulgativa, un somero estudio sobre los orígenes del rap, para acometer en la segunda parte su desarrollo en Estados Unidos, seguir inspeccionando los primeros rastros, esas primeras huellas aparecidas en vinilo a mediados de los años setenta, para concluir con un epílogo del que extraeremos algunas lecciones.
Aprenderemos, por ejemplo, que el rap ya ha cumplido más de un cuarto de siglo.

LAS RAÍCES DEL RAP

Por lo que se refiere a las influencias en las letras, como algunos musicólogos han señalado, incluso aquí en La Habana, los rappers perpetúan en cierto sentido la tradición de los griots africanos, de esos poetas y músicos negros que denunciaban sus infames condiciones de vida y las de sus contemporáneos, en un mundo en constante crisis. Sin embargo, las raíces más directas del rap se remontan a finales de los años sesenta, con la aparición del grupo conocido como The Last Poets*, un colectivo de jóvenes militantes de izquierda, que transcribían en ritmo y rima todo su cabreo y frustración, con la sana intención de transmitir un mensaje revolucionario.

Las principales influencias musicales pudieran ser, por una parte, el rythm and blues, del que obviamente surgen el soul y el funk (que brotaban en cada esquina), y también el jazz, del que recogían su sentido de la improvisación y su cuestionamiento de los esquemas melódicos clásicos.

El rap es pues, un puño levantado, un medio para predicar la palabra frente a un público desconocido, e intentar convencerle cualquiera que sea el mensaje. Las ideas centrales no son complicadas, sino simples, como flashes sonoros, como shocks repetidos de palabras cortas o largas, fonéticamente muy bien estudiadas y destinadas a provocar a la audiencia.

Pero en los orígenes del rap también se hallan los aromas jamaicanos, isla donde con otros estilos y danzas, utilizando vehículos bastante amplios o bien camiones dotados de altavoces enormes, los seguidores de la ganja o marihuana*, la Biblia y el reggae divulgaban a los cuatro vientos, desde la primera mitad de los años 60, sus anhelos y quejas. Entre ellos, Clive Campbell, más conocido bajo el nombre de KOOL HERC, a quien se denomina padre fundador de la cultura hip-hop y, por tanto, del rap.

En 1973, este joven jamaicano, que había emigrado en 1967 a Nueva York, fascinado por los discos de James Brown, se hallaba animando una tarde la fiesta de cumpleaños de su hermana, en el sótano del edificio donde vivían, en el Bronx, y no se le ocurrió otra cosa para animar el guateque que interconectar dos platos (tocadiscos), mezclando temas de artistas del mismo estilo, jugando con los vinilos, llevándolos manualmente de atrás hacia delante, o viceversa, logrando un ritmo y sonidos (scratching) increíbles y nunca escuchados antes.

Al mismo tiempo, este insólito DJ tomaba el micrófono y lanzaba sus poemas, chistes, felicitaciones y gamberradas, lo que hipnotizó a los invitados que, desde la pista respondían a Clive, repitiendo algunas frases de éste con más o menos gracia, tal y como Ray Charles realizó en vivo cuando grabó el inefable "What`d I Say". No contento con todo ello, y ya cada semana a partir de esa fiesta, Campbell invitaba a subir a escena a una "celebridad’ de los barrios aledaños, que asumía durante algunas horas el papel de cantante y DJ.

Esos improvisados-improvisadores comenzaron a evolucionar, tanto en el contenido de los textos como en la utilización de los vinilos que sirvieran de soporte a sus mensajes. Así fue el nacimiento de los primeros MC, de los Amos de la Ceremonia, de los primeros rappers e incluso de toda la cultura Hip-Hop, que se extendería desde entonces, poco a poco, por toda América del Norte.

(Continuará)

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*The Last Poets fue un grupo de rappers nacidos en la era llamada "de los derechos civiles". Poco después la muerte de Martin Luther King, Se trataba de David Nelson, Gylan Kain, y Abiodun Oyewole, que se constituyeron como colectivo el 19 de Mayo de 1968, aniversario del nacimiento de Malcolm X. Al comienzo eran tres poetas acompañados por un batería, pero pronto fueron siete artistas hispanos, negros y jóvenes, con la llegada de Felipe Luciano, Umar bin Hassan, Jalal Nurridin, y EL Hadi (hay que decir que Gil Scott Heron nunca fue miembro del grupo). Tomaron su nombre de una obra del poeta surafricano Willie Kgositsile, que defendía la necesidad de poner a la poesía al frente de la revolución que se iniciaba en aquellos años en EEUU. (Nota del autor)

*La ganja (marihuana) es considerada la "hierba de la sabiduría" por los Rastafarianos, pues su uso ayuda a uno a ganar conocimiento. Para ellos es como parte de un rito religioso y un medio para conseguir la paz interior y el contacto con Jah (Dios). La ganja también es vista como la hierba de la vida, mencionada en la Biblia, cuyo uso está justificado por los salmos comprendidos entre el 104 y el 114, donde se lee: "Hay una sagrada hierba que crece para los ganados y otra al servicio del hombre, que le ayuda a obtener la paz en su interior y el alimento de la madre tierra". (Nota del autor)

Nota.- La próxima semana "El rap en EEUU".