lahaine.org
Andalucía :: 11/12/2004

San Bernardo, un Barrio que ya no Es Tal

La Haine - Sevilla
Los intereses inmobiliarios que se desarrollan durante las décadas de los ochenta y los noventa en el barrio acaban destruyendo casi por completo la composición social de la zona.

San Bernardo es un barrio constituido como tal por su historia y sus condicionantes geográficas dentro de la ciudad, fuera de divisiones administrativas o parroquiales.

Es un arrabal histórico cuya antigüedad data de la Sevilla árabe y musulmana de los siglos X-XI. En este arrabal Este de Sevilla se crean las primeras fundiciones que a partir del siglo XIV se especializan en la fabricación de cañones. En el siglo XVI se levanta la iglesia cristiana de San Bernardo que dará al barrio su nomenclatura actual. La expansión de este barrio no es difícil de deducir. Al igual que el resto de los arrabales de Sevilla se ocupa principalmente por trabajadores de Andalucía occidental emigrados del campo, huyendo del paro estacional y el hambre endémica del latifundio, y atraídos por la demanda de trabajo para la construcción y la industria.

Se trata por tanto de un barrio históricamente poblado por clase obrera que vivía en torno a sus áreas de trabajo, en este caso pequeñas industrias siderometalúrgicas. Pasados los años las fundiciones privadas fueron sustituidas por la Fundición de Bronces de Artillería y la Real Fábrica de Artillería.

La situación extra-muros aislaba en principio a los arrabales obreros como San Bernardo del resto de la ciudad. Las comunicaciones y equipamientos del barrio siempre estuvieron dejadas de lado por la administración, cuyos esfuerzos en infraestructuras se dirigían a mejorar el transporte de mercancías de las industrias que poblaban la zona con la implantación del ferrocarril.

La llegada del ferrocarril el pasado siglo no aportó nada nuevo ni mejoró las comunicaciones de San Bernardo, más al contrario, las empeoró, llevándolo a su aislamiento como gueto de clase obrera, que además contaba con las negativas condiciones de insalubridad de las viviendas colectivas, patios, corrales y casas de vecinos.

La decadencia de San Bernardo comienza en los años sesenta. Al envejecimiento progresivo de la población se le suma la intención del ayuntamiento de hacer una reforma generalizada en la zona, mencionada en el PGOU del 62, que nunca llegó a realizarse. La incertidumbre creada por el plan anima la tendencia generalizada de los propietarios de la zona a no realquilar las casas cuando están vacías y a no invertir en el mantenimiento de los edificios.

La revalorización de San Bernardo comienza en los años ochenta, sin embargo el empujón definitivo lo da la Expo 92. La desaparición de la Estación de Cádiz, la nueva avenida (Avenida de la Buahira) abierta entre el barrio y las antiguas huertas que pasan a ser los Jardines de la Buahira, así como el hiper-desarrollo del distrito financiero de Nervión entorno a esta barriada va determinando su destino. Como consecuencia de la reordenación del trazado ferroviario se derriban un gran número de manzanas, pobladas por viviendas obreras, que iran siendo acaparadas por la inmobiliaria Osuna y que acabarán como viviendas de lujo y como el horrible mamotreto, hotel de cuatro estrellas, que encontramos en la actualidad en la Buahira.

Los intereses inmobiliarios que se desarrollan durante las décadas de los ochenta y los noventa en el barrio acaban destruyendo casi por completo la composición social de la zona. La tenencia de las viviendas, en alquiler, y el envejecimiento de la población y de los edificios hace factibles y baratos los desalojos, a través de sucesivas declaraciones de ruina. En un par de décadas se rehabilitan o reconstruyen manzanas enteras que van siendo ocupadas por nuevos inquilinos de mayor poder adquisitivo.

En San Bernardo aún hoy vemos numerosas casas vacías, casas en ruinas abandonadas por sus dueños, solares y grúas. Sin embargo lo que hoy allí predomina son las viviendas de clase pudiente, de nueva planta o rehabilitadas, donde han venido ha vivir los nuevos vecinos, técnicos, arquitectos, abogados, funcionarios, etc. gente que puede pagar lo que por este suelo se pide.

 

Contactar con La Haine

 

Este sitio web utiliza 'cookies'. Si continúas navegando estás dando tu consentimiento para la aceptación de las mencionadas 'cookies' y la aceptación de nuestra política de 'cookies'.
o

La Haine - Proyecto de desobediencia informativa, acción directa y revolución social

::  [ Acerca de La Haine ]    [ Nota legal ]    Creative Commons License ::

Principal