Ayer nueva jornada de paro masivo en Francia

La gotaq que rebalsó el vaso fue la reforma antipopular de la jubilación. El paro causó un severo impacto en el transporte público, crisis sin perspectivas de solución a la vista.

Escasos trenes internacionales, regionales y locales y solo dos líneas del metro, ambas automatizadas, prestando servicio en esta capital marcaron una jornada parisina con paradas y buses atestados y algunos embotellamientos, aunque menores que durante la semana.

Las previsiones de hoy son igual de negativas para los usuarios del transporte público y los franceses en general, quienes comienzan a preguntarse si las fiestas navideñas verán un mejor escenario que el actual, con el régimen firme en su decisión de impulsar el sistema jubilatorio universal por puntos y los sindicatos opuestos sin señales de ceder.

Según los ferroviarios de la Confederación General del Trabajo, la segunda organización sindical más fuerte de Francia, no habrá receso de la huelga en navidad, mientras otros sectores advierten que la situación se conocerá bien la semana próxima.

El régimen quiere establecer la edad de referencia para el retiro a los 64 años, lo que significaría trabajar hasta la misma para recibir la totalidad de los beneficios o enfrentar descuentos. La edad referente, aunque sin cambiar la oficial de jubilación (62), irritó a los sindicatos, incluyendo a la poderosa Confederación Francesa Democrática del Trabajo (CFDT), una entidad reformista que es la más cercana al régimen y la única partidaria de su iniciativa.

Semejante postura significa que el 17 de diciembre, todos los grandes sindicatos franceses marcharán por el país, un complicado reto para el régimen, que con la CFDT de su lado desde el comienzo del paro, el 5 de diciembre, ya ha tenido que lidiar con buena parte del país paralizado, particularmente en materia de transporte.