Carta de un veterano del ejército israelí
Yo era miembro de las fuerzas armadas israelíes de 1972 - 1975 y participé en las ocupaciones ilegales sionistas de Palestina, Egipto y Siria y la guerra árabe-israelí de 1973. He sido testigo de la firmeza y la resistencia del pueblo palestino, junto con sus aliados de otras comunidades árabes.
Aunque los sistemas de armas, en su mayoría financiados y suministrados por EEUU, han sido modernizados en los últimos años, y el ejército israelí se ha retirado de Egipto, mucho sigue igual. Palestina y Siria siguen siendo ocupadas por unidades de combate y colonos israelíes. Egipto continúa ocupado -- por el Banco Mundial, el FMI y los más de 690 soldados estadounidenses que forman parte de la Fuerza Multinacional y Observadores creada por el llamado Tratado de Paz del 1981 entre Egipto e Israel.
El actual asalto israelí contra la población de Gaza es una fase más de la colonización sionista y la ocupación de Palestina, cuyas raíces se remontan al siglo 19. Esta ocupación solo puede ser realizada por un ejército israelí alimentado por el racismo y la deshumanización de sus vecinos palestinos.
Veteranos por la Paz, en una declaración aprobada en su recién concluida Convención Nacional de 2014, "alienta a todos los soldados israelíes a evitar ser parte de los crímenes de guerra contra inocentes civiles palestinas/os y considerar todas sus opciones para estar al lado de la humanidad".
Los activistas anti-guerra y reservistas militares israelíes que rechazan la orden y los objetores de conciencia deben recibir el apoyo y la asistencia de activistas de paz en EEUU. Y los líderes civiles y militares de Israel que planearon y llevaron a cabo este genocidio deben ser enviados a La Haya y enjuiciados por crímenes de guerra.
Michael Kramer,
Presidente Capítulo Sección 021 (norte de Nueva Jersey)
Veteranos por la Paz