Convocatoria a la Semana Internacional de Solidaridad con lxs Prisionerxs Anarquistas

El mundo está ardiendo. La crisis climática es cada vez peor. En lugar de máscaras covid-19, las personas ahora tienen que usar máscaras de humo de incendios forestales. Al mismo tiempo, grandes áreas se están inundando debido a las lluvias torrenciales y están siendo destruidas por la continua contaminación del medio ambiente.

Nada de esto se debe a las elecciones individuales de las personas. No es causado por comprar el producto equivocado en el supermercado. Es causado por la explotación sistemática de la naturaleza y la humanidad. Los gobiernos y las grandes corporaciones son los que nos arrastran a un desastre climático que parece imparable en este momento. Gobiernos y grandes corporaciones que han creado un mundo donde los ricos son más importantes que los demás. Esto fue especialmente evidente en un momento en que los medios de comunicación del mundo no tenían nada mejor que hacer que hablar sobre un submarino perdido lleno de cinco personas ricas durante cinco días.

La política de extrema derecha, conservadora y autoritaria está en aumento en todo el mundo. Algunos la usan para iniciar guerras y matar a miles de personas, otros construyen vallas y custodian lo que consideran de su propiedad, y otros abusan de ella para hacer la guerra en el mundo digital. La vigilancia va en aumento, y los estados se entrometen cada vez más en nuestra privacidad, analizan nuestras conversaciones privadas y recopilan datos sobre nosotros con una profundidad de detalle que nunca podríamos haber imaginado. Las herramientas de los estados para reprimir la resistencia, para suprimir incluso los pensamientos de luchar contra el sistema, se están agudizando minuto a minuto. Muchos anarquistas, antiautoritarios, activistas medioambientales y antifascistas de todo el mundo se enfrentan a la represión porque actuar de forma anónima en un mundo digitalizado es más difícil que nunca.

Con todos los obstáculos que se nos ponen en el camino durante la lucha por un mundo mejor, las ideas y valores anarquistas siguen siendo importantes. En tiempos de crisis empiezan a destacarse los métodos de organización colectiva, la ayuda mutua y el principio de solidaridad. El sistema se derrumbará y debemos prepararnos para recuperar el mundo que nos robaron las corporaciones, los propietarios de yates y la industria de la guerra. Un mundo que estaba destinado a todos. Y mientras nuestros amigos están encerrados tras las rejas y los estados intentan esconderlos en los rincones más oscuros de sus prisiones, nosotros no nos quedaremos callados, pero lucharemos hasta que sean libres nuevamente.

Por eso volvemos a anunciar la Semana Internacional de Solidaridad con los Presos Anarquistas. ¡Haz alguna acción solidaria! Escribir cartas, organizar conferencias o proyecciones de películas, visibilizar en las calles a nuestros amigos presos colgando una pancarta o pintando grafitis y hacerles saber que siguen en nuestro corazón y que luchamos juntos.

Recordemos a quienes lucharon contra esta injusticia y la pagaron con su vida.

¡Nadie es libre hasta que todos sean libres!