La cumbre del G20 fue "una derrota de EEUU y de Occidente"
En una entrevista con Sputnik, el analista geopolítico Alfredo Jalife-Rahme analiza los resultados de la XVIII Cumbre de Líderes G20 que se realizó en Nueva Delhi, en la India. El experto asevera que el evento dejó en claro la influencia de los países del sur global en el escenario internacional. Aseguró que EEUU y sus aliados trataron de imponer una agenda política a favor de Ucrania en un foro económico; sin embargo, este plan no prosperó gracias a la intervención de países como Indonesia, la India y Brasil.
"Gracias a ellos se despolitiza el G20 con el asunto de Ucrania que llevaba Biden. Me llama también la atención la ausencia del liderazgo europeo (...) No tiene nada que ver el foro con la cuestión geopolítica y, al tumbarles [la agenda], se iba a caer toda la cumbre, por eso yo veo que fue una derrota de EEUU y de Occidente", explicó.
La reunión de los líderes del G20 concluyó el 10 de septiembre en Nueva Delhi, sin que las potencias occidentales lograran colar el tema de la crisis ucraniana en la agenda, y con una serie de promesas dirigidas a aumentar la voz del sur global.
"[La derrota de EEUU y Occidente] está ligada sobre todo a los BRICS, no olvidemos que la misma India es un país que pertenece a los BRICS y que hay más de 40 países que quieren entrar. El G20 es una mezcla del G7, que no está dando resultados, con los BRICS, nada más que los BRICS van creciendo, mientras que el G7 yo no veo que quieran agregar a nadie", abundó.
Para el analista mexicano, Occidente está en "decadencia", pues su hegemonía se ha visto mermada ante el crecimiento de naciones en vías de desarrollo.
La incorporación de la Unión Africana
Los miembros del G20 saludaron a la Unión Africana como miembro permanente del grupo, de acuerdo con la declaración final de la cumbre del organismo, y subrayaron que África desempeña un papel importante en la economía mundial.
"Nos comprometemos a fortalecer nuestros lazos con la Unión Africana y a apoyarla para hacer realidad las aspiraciones de la Agenda 2063", indica la declaración. Esta adhesión, sentenció Jalife-Rahme, "es un efecto del BRICS", pues uno de los países que impulsó la entrada de la Unión Africana al G20 fue justamente la India, el país anfitrión.
"Con esto, el G20 se vuelve menos Occidental y está en un plan neutral, está equilibrado", indicó.
Sin embargo, el analista observó que ni Rusia ni China le ven futuro al bloque, "porque el G20 ya en términos económicos no está dando resultado". La más reciente cumbre del G20 "no tiene comparación" con la de los BRICS que se realizó entre el 22 y el 24 de agosto pasados. "El G20, la misma Rusia lo ve, puede implosionar y muchos países se pueden salir", abundó.
Este año, agregó el experto, "se notó el sello, por primera vez, en el G20 del sur global", dijo. "Lo que más resalta es la derrota geopolítica de EEUU y de Ucrania, precisamente al no haber podido doblegar al sur global, que no se quiere meter en ese problema".
El G20 aglutina a Alemania, Arabia Saudita, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, EEUU, Francia, la India, Indonesia, Italia, Japón, México, el Reino Unido, Rusia, Sudáfrica, Turquía y la Unión Europea, que juntos representan el 80% de la economía global, dos terceras partes de la población mundial y el 75% del comercio internacional.
"La declaración [final del G20] formuló las tareas de reforma del Fondo Monetario Internacional [FMI], donde desde hace mucho tiempo, si las cuotas y los votos se dividen honestamente, los estadounidenses ya no tendrán un voto de bloqueo, que se conserva artificialmente", destacó.
Sputnik / La Haine