La policía detiene a más de 90 personas tras masivas protestas contra el gobierno griego

Los estudiantes convocan nuevas manifestaciones para este viernes.

Con saldo de cinco heridos y más de 90 detenidos, la policía griega reprimió violentamente este jueves a una multitud de manifestantes congregados alrededor del Parlamento en la capital, Atenas, quienes acusan al Gobierno de responsabilidad en el luctuoso accidente ferroviario ocurrido el 28 de febrero de 2023.

Medios locales informaron que en las inmediaciones del Legislativo se congregaron más de 15.000 manifestantes, quienes exigieron justicia por el mortal accidente de tren, ocurrido en la localidad de Tempe, donde murieron 57 personas.

Los manifestantes, que fueron desplazados por la brutalidad policial, devolvieron los gases lacrimógenos que lanzaban los represores y quemaron mobiliario urbano para protegerse de las cargas.

En otros puntos del país, miles de personas se han movilizado también. En Salónica, segunda ciudad de Grecia, hubo de nuevo multitudinarias protestas contra el Gobierno y un total de 59 personas fueron arrestadas.

Las protestas ocurren en un contexto político tenso. El miércoles, la oposición de izquierda, liderada principalmente por el Partido Socialista Panhelénico y la Coalición de izquierda Radical, presentó una moción de censura, la cual será finalmente votada el viernes próximo.

Durante los debates parlamentarios, Nikos Adroulakis, líder del Partido Socialista Panhelénico, acusó directamente al Gobierno actual de encubrir “la tragedia ferroviaria más mortífera de Grecia” desde 1968.

Con el objetivo de negar el encubrimiento y aplacar el descontento, el primer ministro, Kyriakos Mitsotakis prometió este miércoles “verdad y justicia” respecto al accidente ferroviario en Tempe. Declaró que el incidente es investigado para que “se establezcan los hechos” y se desarticule la “narrativa de la oposición”.

De esta manera, se entregó un informe redactado por expertos (muchos dicen que están pagados por la multinacional italiana dueña de los trenes), los cuales hablan de errores humanos y fallos de los encargados de seguridad, quitando responsabilidad tanto al Estado como a la empresa. En el informe se descartó que se eliminaran pruebas o cualquier indicio de manipulación gubernamental.

El 28 de febrero de 2023 un tren de carga colisionó frontalmente con otro de pasajeros cerca de la localidad de Tempe, en un tramo de vía que carecía de sistemas automatizados de seguridad. Una gran parte de la población consideró la tragedia como una consecuencia del abandono al sector ferroviario por parte de las autoridades.