"Si no hay cambios estructurales en la economía, en la política, en lo social, nada va a cambiar"

El análisis de James Petras en CX36, 1 de junio de 2020. Escuchar: https://archive.org/details/el-analisis-de-james-petras-en-cx-36-01jun-20_202006

Hernán Salina: ¿Profesor, qué tienen de distinto estas protestas detonadas por un caso de violencia policial? ¿Qué es lo que está diferenciando este episodio de las historias anteriores?

JP: Bueno, tiene muchas similitudes con los años 60's y 70's por el acto de violencia contra los afroamericanos, los latinoamericanos, pero lo que uno tiene que analizar es el nuevo contexto donde una gran masa blanca está participando también en estas protestas. Y segundo, que la policía no puede eliminarlos, no puede disminuir las protestas, no tiene capacidad de controlar. Fijate que hay 40 ciudades bajo toque de queda, la Guardia Nacional está activa en 15 ciudades, es una militarización de los importante centros de la ciudad.

Y hay otra cosa que debemos tomar en cuenta, en este momento hay más de 25% de desocupados, esta protesta ocurre no sólo por el racismo y el asesinato del afroamericano George Floyd. Eso fue el detonante, pero lo importante es que tenemos más de 30 millones de norteamericanos desocupados, no tienen futuro económico, hay millones de jóvenes que terminan la secundaria y la universidad y no encuentran trabajo. Estos factores económicos y sociales junto con el problema de racismo, es un detonante que no existía antes en otras manifestaciones.

Yo creo que el verano caliente en el próximo período junio, julio, agosto va a tener una enorme consecuencia para el país. Y más, tenemos un presidente muy reaccionario que ha dicho que perros fieros deben atacar a los manifestantes. Al presidente Trump tuvieron que esconderlo bajo la Casa Blanca en un bunker porque las manifestaciones ocurren frente a la Casa Blanca y tratan de entrar para exigirle a Trump. Tuvieron que llamar a las fuerzas especiales de seguridad, esconderlo y protegerlo.

Entonces ahora tenemos un presidente súperreaccionario, tenemos una economía en quiebra, tenemos una pandemia que se ha multiplicado, tenemos el asesinato de afroamericanos, tenemos policía fuera de control de las autoridades civiles. Ahora hay muchas voces que van a tratar de edulcorar a la policía, pero la policía aquí tiene un poder autónomo de las autoridades. Solo cuando hay un caso como en Minneapolis donde la policía en un vídeo tiene las rodillas en el cuello del afroamericano, es cuando la policía tiene que enfrentar algún proceso judicial.

HS: ¿Cabe esperar algún cambio desde lo legal? Que haya mayores sanciones o control a la policía, o lo único que generan las protestas es que se acelere un poco el proceso legal contra este responsable en particular.

JP: Yo creo que estamos en una fase donde con tantas manifestaciones, protestas, brotes de violencia, es difícil volver a la normalidad y continuar sin responsabilizar a la policía por el asesinato de ciudadanos.

Creo que vamos a pasar a una fase ahora de autoinculpación de los policías, de los funcionarios del gobierno. Van a condenar las situaciones que ocurren y ahora van a llamar a una comisión de investigación. Van a descubrir que la policía necesita más control, más supervisión, que se debe plantear una nueva forma de actuar.

Todo eso va a pasar ahora frente a la gran confrontación con más de 100 ciudades en protesta, es una cosa insólita. Podríamos decir que este contexto va a exigir que los gobernantes tomen alguna acción.

Además de la extrema derecha de Trump, que pide más represión, que pide perros para atacar a los manifestantes, yo creo que en este contexto vamos a tener un proceso prolongado de reuniones, de discusiones, de formar una comisión que prepare un documento que puede ser de cien o mil páginas sobre lo que está pasando y lo que ha pasado en el conflicto.

Van a reclutar a algunos afroamericanos para conseguir mejorar la imagen del gobierno, reclutar más policías negros, planear una forma de actuar más de acuerdo a las leyes, pero con el tiempo todo va a quedar en nada como en el pasado. Pero antes, si vamos a estudiar la historia, en los otros años de manifestaciones contra el racismo, hubo la misma represión de la policía, las mismas comisiones, pero nada cambió porque la estructura del poder es contra los afroamericanos, latinoamericanos y otros.

Entonces, yo creo que si no hay cambios estructurales en la economía, en la política, en lo social, nada va a cambiar, sólo vamos a tener pequeños baches que no van a dar ninguna respuesta a las necesidades.

Actualmente hay cerca de 50% de afroamericanos sin trabajo en la categoría menores de 35 años. Entonces, primero hay que enfrentar el problema del coronavirus, donde los afroamericanos y latinos sufren más casos. Después tenemos el problema de la desocupación, que es altísimo entre los mismos grupos. Hay problemas estructurales, vivienda, salud, educación, empleo, todo junto crea situaciones de extraordinarias exigencias.

HS: ¿Otros temas que quiera mencionar en el final de la columna de esta semana, Petras?

JP: Sí, podríamos bajar a América Latina, a Argentina, supuestamente está cerca de un acuerdo con los acreedores, pero todavía no han firmado. Y si van a firmar un acuerdo, el presidente Fernández aparentemente va a capitular en algunos puntos importantes para los argentinos. Significa que tienen que transferir miles de millones de dólares a los banqueros y acreedores.

Entonces, viendo que en Argentina se multiplican los problemas, con el coronavirus, con el desempleo y ahora con el acuerdo con los acreedores, eso podría provocar levantamientos también en ese país como en EEUU o como en el año 2001.

Y finalmente tenemos Hong Kong, deonde Washington quería exagerar la importancia que tenían los opositores a China. Y esos opositores están perdiendo influencia cuando los banqueros y los hombres de negocios, las multinacionales, tienen que elegir entre oportunidades con China y la retórica de Trump: van en masa en favor de China. Hong Kong en poco tiempo va a ser una ciudad de China incorporada en la política de Beijing.

HS: ¿Y qué podemos decir de Brasil, donde sigue la crisis política y todo apunta a un aislamiento cada vez mayor del presidente Bolsonaro? ¿Puede estarse acelerando el final de su gestión, Petras?

JP: Bueno, está acelerando los muertos sí, está acelerando los afectados por coronavirus, se está multiplicando el descontento. Yo creo que Bolsonaro se queda en el gobierno sólo hasta el fin de este año, no puede mantenerse, no se puede aguantar más.

En resumen, podríamos decir que este verano va a ser muy caliente políticamente en los EEUU. Estos días son solo la apertura hacia un año de mucha violencia, de muchos conflictos y mucha polarización entre Trump y los neofascistas contra una masa de población afroamericana, blancos desocupados, hispanos y otros.

Extractado por La Haine