VII marcha del orgullo de lesbianas, gays, bisexuales, transexuales y transgéneros

Pasadas las 16:00 horas, se dio inicio a la Marcha por el Orgullo, convocada por el Movimiento unificado de minorías sexuales, MUMS; el Sindicato Nacional de Trabajadores y Trabajadoras Luis Gauthier y la Corporación Chilena de prevención del SIDA, Sidacción. La actividad congregó a diversas organizaciones que, entre otras cosas, demandaron la modificación de aquellas leyes y disposiciones que atentan contra las libertades sexuales, como el artículo 373 del código penal que deja libre la posibilidad de reprimir y perseguir en nombre de la "moral y las buenas costumbres" a quienes poseen una orientación sexual diferente, además de conmemorar las luchas llevadas a cabo por los movimientos Lésbico, Gay, Bisexual, Transgénero e Intersexual a lo largo de varias décadas, por el derecho a la vida, al trabajo y al reconocimiento de su dignidad.

L@s cerca de 8.000 manifestantes marcharon desde Plaza Italia hasta Plaza Los Héroes, que entre bailes, desfiles improvisados y esporádicas consignas, fueron llevando a cabo un verdadero carnaval por la principal arteria de Santiago. Una vez en Los Héroes, se agradeció la masiva concurrencia por parte de aquell@s que apoyan las reivindicaciones en lo relativo a lograr una equidad entre géneros, siendo parte o no del movimiento GLBTT. No faltó el candidato que, a modo de ganar votos, se comprometió para legislar a favor de el matrimonio homosexual y el fin a las discriminaciones. Se fijó el término de la actividad a las 6 de la tarde, y su culminación de facto no sobrepasó en gran medida el horario determinado por la intendencia.

Hace unos 5 años se realizó la Primera Marcha por del Orgullo, y desde aquélla hasta su séptima versión, se ha intentado alterar la monótona rutina de las tardes capitalinas para que tod@s l@s que son discriminad@s y reprimid@s por su condición sexual, puedan expresar con sus cuerpos , con su alegría o con su rabia , que están allí y que no son poc@s. Sin embargo, asumir e identificar estas manifestaciones con una celebración-fiesta, es hacer caso omiso al cometido político de las mismas; en otras palabras, es olvidar la lucha que día a día much@s hacen latente contra un sistema que coarta, oculta y desvanece las particularidades.

"Alguna vez marchamos a rostro cubierto ¡Qué vergüenza ¡ ¿Verdad? ¿Por qué habríamos de taparnos el rostro? No somos desviados, ni delincuentes, ni criminales, somos personas que tenemos una orientación sexual diferente que no responde al modelo de sexualidad heteroficialista, porque el sexo es algo mucho más complejo que un mero vínculo biológico, procreativo, desvinculado de goce, tema del que no se quiere hablar, que se escabulle, que se elude cobarde y vergonzosamente excluyéndolo de los programas de educación de niños y jóvenes."
Enrique Sanhueza (gentileza de www.mums.cl)