Al Gore: la verdadera cara del premio nóbel

Si examinamos el pasado del premiado nos daremos cuenta que el personaje poco tiene de pacifista, si profundizamos un poco veremos que tampoco es progresista y si seguimos investigando constataremos que ni siquiera podríamos llamarle ecologista.
El antiguo congresista por Tennesse y vicepresidente de los Estados Unidos entre 1993 y el 2001 ha conseguido volver a colocarse en la primera línea política mundial después de la derrota en las presidenciales del 2000. Y todo gracias a una película. “Una verdad incomoda” (An Inconvenient Truth) que le ha traído 2 Oscar, un gran reconocimiento internacional (como el premio Príncipe de Asturias de cooperación internacional) y suculentos beneficios económicos.

En este documental Al Gore se nos presenta como el adalid en la lucha por reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. La película es una autentica hagiografía, parece realizada por su equipo de campaña. Al Gore no duda en mostrarnos su intimidad, contarnos sus tragedias familiares mostrándose como un hombre que es capaz de superar las adversidades aprendiendo de ellas. Esta tendencia a la sobreactuación y este egocentrismo desmesurado es de sobra conocida en los USA.

La “costumbre” de Gore de exagerar sus meritos ha dado toneladas de munición a sus rivales políticos. Entre sus muchas fanfarronadas Al Gore se atribuyo el merito de la creación de Internet (“durante mi permanencia en el Congreso de los Estados Unidos, tomé la iniciativa de crear Internet” entrevista de Wolf Blitzer de los informativos de la CNN en1999) o presumía de que su matrimonio inspiro los personajes del empalagoso melodrama “Love Story” (conversación con Karen Tumulty de la revista “Time”). Ungido por la mano de Dios Gore no se rinde después de la derrota electoral, se ve como el hombre que salvara a los Estados Unidos ¡al mundo! del Desastre. Gore se ve a si mismo como a un nuevo Winston Churchill. En su película muestra imágenes del día de la victoria y no duda en citarlo.

Como los ingleses acudieron a su admirado Winston para combatir el terror nazi, así acudirán los pobres americanos cuando la gran crisis energética, el hundimiento económico o que se yo amenacen a los americanos. Analizando al personaje descubrimos una personalidad contradictoria y mucho mas oscura de lo que sus admiradores insisten en mostrar.

AL GORE ¿PACIFISTA?

El vicepresidente Gore no se conformo con un papel secundario los años de gobierno demócrata. Fue la mano derecha del presidente antes y durante su mandato, Al Gore no era una figura decorativa al estilo Dan Quayle (vicepresidente durante el mandato de Bush padre).

Al Gore es responsable de prácticamente todas las acciones de gobierno del periodo 1992-2000. Y durante esos años los Estados Unidos no fueron unos emisarios de la paz precisamente. Acciones bélicas, con bombardeos con uranio empobrecido y bombas de racimo incluidos, en Serbia, Irak, Haití, Afganistán, Somalia o Sudan. Este último caso fue especialmente cruento.

El ejercito norteamericano bombardeo una fábrica de medicamentos que confundió con una planta de fabricación de armamento matando a centenares de personas y destruyendo la planta que fabricaba el 50% del total de medicamentos del país. A día de hoy (y me temo que por muchos, muchos años) ningún político y ningún militar ha rendido cuentas por ese espantoso crimen de guerra. Grandes meritos para un Nóbel de la paz, sin duda.

La política de Clinton-Gore fue continuista de la de Reagan-Bush y la de Bush hijo prosigue la de los años demócratas. Todos ellos buscaron y buscan la hegemonía económica de los Estados Unidos protegidos por el poderío militar de su ejército. Imponen su liderazgo sin contar con ningún consenso internacional. No olvidemos que solo en los últimos tiempos, y solo después de comprobar la peligrosa inestabilidad del país, se han oído voces demócratas pidiendo la retirada de las tropas de Irak.

AL GORE ¿PROGRESISTA?

Casi todo el mundo entiende que las políticas del Partido Republicano y el Partido Demócrata son convergentes en muchos aspectos. Mas similares todavía que las de los partidos parlamentarios europeos socialdemócratas o conservadores. Sin embargo al comparar a Gore con la actual administración Bush corremos el riesgo de engañarnos con el personaje.

Al lado de los “Neo-Cons” y la derecha ultrareligiosa que gobiernan los USA, cualquiera puede parecer progresista. Pero Al Gore no es un recién llegado y demostró con creces su verdadera cara en los años de mandato del Partido Demócrata. Sus políticas fueron neoliberales en lo económico y muy tibias en lo social. Respecto al tema económico, entre otras la administración Clinton-Gore creo la Organización Mundial del Comercio paradigma junto al Banco Mundial y el FMI del nuevo orden económico mundial. El ALCA o la ley Helms-Burton de castigo hacia Cuba son algunos de sus logros “progresistas”.

En lo social Clinton-Gore endurecieron la represión hacia los inmigrantes y recularon frente a la derecha religiosa en materias como el aborto.

Mención aparte merece la mujer de Gore; Tipper. Personaje controvertido y famoso en los Estados Unidos. No se conformó con ser una mujer florero. Ya en 1984 co-fundo la Parents Music Resource Center, una organización muy cercana a la derecha religiosa que buscaba advertir a los padres de letras o portadas obscenas en los discos de rock y rap y que tuvo una gran influencia en la industria del ocio americana en los 80s y 90s. Creo esta organización cuando descubrió alarmada que su hija escuchaba una canción de Prince que trataba veladamente sobre la masturbación.

Esta organización se cebo especialmente con los grupos más subversivos y antisistema y con los grupos raperos como Public Enemy, muy politizados en aquella época. Al Gore siempre ha presumido de mujercita y se han apoyado mutuamente, llegando a escribir varios libros juntos por lo que presuponemos que el bueno de Al estaba de acuerdo con las actividades censoras de su media naranja.

AL GORE ¿ECOLOGISTA?

Desde el principio de su carrera política Gore tiene una aureola de activista ecologista. La publicación del libro “Earth in the Balance:Ecology and Human Spirit” en el que planteaba una ambigua revolución “ecológica” le llevo a acompañar a Clinton que vio grandes cualidades en el ambicioso senador de Tennnesse.

Sin embargo una vez en el gobierno poco hizo para llevar a cabo su “revolución ecológica”. Ni siquiera firmaron el Protocolo de Kyoto. Es cierto que de haber conseguido la presidencia Al Gore habría firmado el acuerdo que el mismo negocio para su país. Pero no es menos cierto que los Estados Unidos rebajaron ese acuerdo hasta convertirlo en una broma.

Aunque su labor como divulgador de la amenaza que supone el cambio climático ha contribuido a que este en la agenda política de casi todos los países, no podemos olvidar que mientras tuvo la suerte de participar en el gobierno del estado mas poderoso de la tierra y el mas contaminante con diferencia, las emisiones de gases de efecto invernadero no pararon de crecer y el medio ambiente de los Estados Unidos no paro de degradarse, especialmente en zonas tan sensibles como Alaska, privatizada en parte para beneficio de las compañías petroleras. ¿Qué fue de la “revolución ecológica de Al? Es más fácil hablar cuando no respondes de tus acciones. “Consejos vendo que para mi no tengo”.

Lo mejor de Al Gore ha sido sin duda desenmascarar a los “negacionistas” del cambio climático como la “Coalición por el Clima Global formada por empresas con intereses en la industria del carbón. Este lobby ha financiado estudios que cuestionaban la influencia de las emisiones de carbono en la atmósfera y hasta el propio calentamiento global con el objetivo de crear “dudas razonables” en la opinión pública.

Al Gore aboga por reducir el consumo domestico pero como se ha publicado en los medios no predica con el ejemplo (se ha comentado que su familia gasta 20 veces mas que una familia media americana). Tampoco ha donado los cuantiosos beneficios que ha proporcionado su documental ni los ¡180.000 euros! que cobra por charla para investigación. Puede que sea demagógico atacarle por ese lado pero los datos claman al cielo.

LA REVOLUCIÓN ECOLOGICA SERA SOCIALISTA O NO SERA.

Al Gore y todos los gobiernos capitalistas intentan combatir el calentamiento global simplemente cambiando las fuentes de energía y reduciendo minimamente el consumo domestico. No se plantean reformas estructurales ni cambios en el modelo social y productivo que nos esta llevando a la ruina. Por eso sus recomendaciones, su “revolución verde” no son más que pequeños parches de un sistema caduco y desbordado.

Es posible que Al Gore tenga un sentimiento ecológico sincero pero en su etapa en el gobierno demostró ser el problema y no la solución. El planeta necesita una revolución no solo ecológica sino total que nos salve del precipicio donde nos están empujando gentes como Al Gore.

kimetz