Brasil: La nueva ministra de los agronegocios
Luego de la designación del neoliberal Joaquim Levy a caego de Economía, las organizaciones políticas aliadas al oficialismo repudiaron las negociaciones con la derecha y la oposición política, que también tendrá funcionarios en el gabinete de gobierno.
El próximo 1 de enero comenzará de modo oficial el segundo mandato de Rousseff con diversos cambios en su gabinete que incluye concesiones a las corporaciones económicas financieras y a los partidos de la oposición – tendrán lugar el Partido del Trabajo, el Partido del Movimiento Democrático Brasileño, el Partido Social Democrático y el Comunista Do Brasil-.
Entre ellos, la asunción de la empresaria y senadora Katia Abreu al frente de la cartera de Agricultura es una de las figuras más resistidas por las organizaciones políticas populares por sus fuertes vínculos con el poderoso sector de los agronegocios. Hasta el momento presidenta de la Confederación Nacional de la Agricultura (CNA), “Katia Abreu es símbolo del agronegocio, que tiene como lógica la tierra para la producción de mercaderías, con uso intensivo de agrotóxicos y semillas transgénicas, destruyendo los recursos naturales y la salud de los trabajadores y de toda la población”, sostuvo Raul Amorim, de la coordinación de la Juventud del MST, a la revista Carta Capital.
“Encabezó una cruzada ideológica en defensa de la agroindustria y los grandes agricultores en seis años al frente de la CNA, la principal portavoz del sector”, precisó el medio local Carta Capital.
Esa cruzada tuvo como aliado fundamental a la corporación mediática: la CNA bajo el liderazgo de Abreu llegó a gastar más de mil millones de dólares en publicidad y formación de “imagen positiva”. El anuncio del nombramiento de “Señorita Deforestación” (como la denominan en Brasil) fue respondido con una movilización en noviembre convocada desde el MST en protesta.
Los agronegocios en Brasil articulan a los grandes latifundistas y empresas de capital transnacional que expande la frontera de los monocultivos que emplean grandes extensiones de tierra, propagan los agrotóxicos y desplazan a campesinos y comunidades originarias. En el mes de febrero, desde el Congreso del MST advirtieron que el agronegocio seguía en manos de escasos rótulos: Monsanto, Cargill, Bunge, ADM y Dreyfuss, en semillas; Nestlé, Parmalat y Danone, en los lácteos. A modo de ejemplo: Brasil ocupa el segundo lugar mundial en la producción de transgénicos con más de 36 millones de hectáreas sembradas de maíz, algodón y soja.
Pero también señalaban la fuerte injerencia de esos poderes en la estructura de gobierno, a lo cual se suma la connivencia de la corporación judicial y mediática. “Han hecho una campaña sistemática para desmovilizar y criminalizar las luchas, para que los trabajadores ni piensen en movilizarse y protestar”, señalaba en esa oportunidad João Pedro Stedile, de la coordinadora nacional del MST.
Economía y regresión
En la misma línea, el nuevo ministro de Economía será el banquero Joaquim Levy, un ortodoxo neoliberal formado en la Universidad de Chicago de Estados Unidos y con larga trayectoria en organismos financieros internacionales, como el Fondo Monetario Internacional, el Banco Central Europeo y el Banco Interamericano de Desarrollo. En la gestión pública, participó en el equipo económico del ex presidente Fernando Henrique Cardoso (del Partido de la Social Democracia Brasileña, PSDB) y fue secretario de Tesoro de Lula Da Silva entre 2003 y 2006.
“Regresión de la agenda que ganó en las urnas” fue la expresión que usaron diversas organizaciones políticas y sociales aliadas al gobierno nacional en un documento de rechazo a los cambios en el gabinete. “Ambos (Levy y Abreu) son conocidos por dar soluciones conservadoras y la defensa sistemática de los terratenientes contra el medio ambiente y los derechos de los trabajadores y las comunidades indígenas “, indicaron.
En el Manifiesto, acusaron a Rousseff de poner en riesgo el proyecto de país disputado en la campaña presidencial: “La oposición no dio tregua después de las elecciones (…) Nuestro papel histórico permanece para derrotar a este programa, pero no queremos sólo elegir a nuestros representantes políticos por temor a la alternativa (…) El presidente electo – Rousseff- parece tener más en cuenta las fuerzas cuyo representante derrotado de diálogo con las fuerzas que eligieron”, firmaron fuerzas como el MST, UNICAMP, y figuras del PT, entre otros.