El Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad apoya libertad para Alberto Patishtán

El jueves 24 de noviembre, afuera de la representación del gobierno de Chiapas en la ciudad de México, el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad celebró un acto en solidaridad con la Peregrinación de miles de representantes del Pueblo Creyente y las Comunidades Eclesiales de Base que llegaron a la plaza de la Catedral de San Cristóbal de las Casas para denunciar la agonía de la Madre Tierra, la pobreza, los macro-proyectos transnacionales que pretenden apropiarse y controlar la tierra y los recursos nacionales, el clima de violencia en el estado, la imposición de la nueva Ley de Seguridad y la criminalización de la sociedad.

En el DF, igual que en Chiapas, la gente levantó la voz por la libertad del profesor Alberto Patishtán. Una comisión recordó a las autoridades en el DF de sus obligaciones y responsabilidades con respecto a la situación del profesor y les entregó una carta sobre su traslado desde Chiapas hasta el penal de Guasave en Sinalóa por razones políticas, el retiro de sus medicamentos para el glaucoma y sus preocupaciones sobre la falta de respeto a sus familiares durante visitas.

El poeta Jorge González explicó que, entre otras cosas, la carta plantea el respeto a la libre determinación de los pueblos indios, fin al asedio de los pueblos y comunidades, respeto irrestricto para la libertad para organizarse y darse la forma de gobierno que mejor convenga a los ciudadanos y grupos, reconocimiento a las autonomías comunitarias…, y la inmediata liberación de todos los presos políticos y los inocentes injustamente encarcelados en el estado de Chiapas. Exige la inmediata liberación del profesor Alberto Patishtán, así como de Julio César Pérez Ruiz, José Pérez Pérez, Marcelino Díaz González, Delia Pérez Arismendi, Antonio Gómez Díaz, Miguel Gómez Gómez, y Jesús López López.

En base a un informe preparado por el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas (Frayba), el padre Ricardo dio información sobre el caso de Alberto Patishtán ––activista Zapatista, integrante de la Voz del Amate y adherente a la Sexta Declaración y La Otra Campaña. Enfatizó el daño a su comunidad ocasionado por su encarcelamiento, incluyendo enfermedades, un daño económico fuerte y tristeza. Recordó que en el 2010 el profesor fue trasladado a un hospital en Tuxtla Gutiérrez, donde lo mantuvieron durante 6 meses esposado a una cama y aislado de la población con el propósito de mantenerlo aislado de su organización. Después de regresar al penal en San Cristóbal de las Casas, Patishtán siguió con su trabajo de concientización, su evangelización desde la perspectiva de la teología de liberación y su organización dentro de la prisión. Hasta su traslado a Sinaloa, él siempre promovía la defensa de los derechos humanos. Patishtán inició junto con La Voz del Amate la huelga de hambre de 41 días en 2008 que resultó en la liberación de casi todos los miembros de La Voz del Amate igual que varios presos en otros penales en el estado de Chiapas.

El padre Ricardo continuó explicando que Alberto Patishtán está preso desde el 19 de julio del año 2000, acusado del homicidio calificado de siete policías, portación de armas y lesiones calificadas. En un juicio cargado de violaciones fue sentenciado a 60 años de prisión. Ahora lleva 11 años preso. Patishtán pertenecía a un grupo de comuneros inconformes con el entonces presidente municipal de El Bosque, el priista Manuel Gómez Ruíz, quien obligó a su hijo Rosemberg a dar testimonio falso en el caso. El informe de la defensa dice: “Hoy sabemos por los familiares de Patishtán que el testimonio fue comprado con una camioneta Ford del año. Cada vez que Rosemberg echa trago, confiesa haber sido obligado a ‘mandar a la cárcel’ a Patishtán”.

El acto se concluyó con la lectura de tres Salmos y una oración en la cual toda la gente respondió a cada súplica del orador con la frase: ¡Por libertad y justicia para Alberto Patishtán!”