El topo dinamita: Milei promueve una estafa piramidal y deja un tendal

El gobierno nacional quedó preso del llamado Principio de Revelación, tan celebrado por el propio presidente Milei.

El viernes por la noche, luego de que cerraran los mercados de valores en la Argentina, el presidente Milei promovió por sus cuentas de redes sociales una nueva criptomoneda denominada $LIBRA. Tan nueva era esa pseudo-moneda que la misma había sido creada pocos minutos antes por un pequeño grupo de inversores.

Casi instantáneamente $LIBRA se convirtió en la “cripto de Milei“ e invitó a miles de personas a sumarse a invertir en ella. En pocas horas, más de 40 mil jóvenes (mayormente varones jóvenes, conocidos como “cripto bros”) aportaron millones de dólares para comprar estas criptos.

La criptomoneda es una creación digital que un grupo de personas puede fabricar a través de plataformas online. Esos activos financieros pueden ser comprados o vendidos como si fueran acciones de empresas, pero su valor subyacente no tiene fundamento.

Es decir, mientras la acción “representa” el valor de una empresa, o un título público “expresa” la capacidad de pago del Estado que lo emitió, las criptomonedas tienen valor porque hay gente dispuesta a comprarlas para especular con la evolución futura de su precio. Algunas criptomonedas son utilizadas para realizar transacciones “reales” (comprar y vender mercancías o pagar trabajos) pero mayormente funcionan como activos altamente especulativos.

En este caso particular, los creadores de $LIBRA utilizaron su criptomoneda para organizar una típica estafa piramidal. A minutos de creada, el Presidente de la Nación argentina habría cometido un delito (tipificado en el código penal en su artículo 265 o en la ley de ética pública): promocionó enfáticamente la inversión en esta cripto, señalando que se convertiría en un canal para promover inversiones en el país. Varios funcionarios y seguidores de Milei (incluidos el “Gordo” Dan y Lilia Lemoine) alimentaron la credibilidad del $LIBRA (aunque luego borraron sus intervenciones en redes sociales).

Por al menos cuatro horas, la publicidad permaneció en redes, mientras el precio de $LIBRA subía más de 8000%. De golpe, a las pocas horas, los creadores de $LIBRA vendieron todas sus tenencias de esa cripto moneda, atesorando lo que se estima serían más de 100 millones de dólares. El valor de $LIBRA se desplomó, llegando a cero en la madrugada del sábado 15. Miles de jóvenes perdieron todas sus inversiones. La estafa estaba consumada.

El escándalo está en marcha

Hace unas semanas, el presidente Milei se había reunido con uno de los socios de $LIBRA. En la madrugada del sábado, el jefe de estado pretendió despegarse de la estafa señalando que “no estaba interiorizado en los pormenores del proyecto” y borró el posteo original. Poco creíble todo.

En semanas donde se ha discutido hasta el hartazgo el problema del dólar barato (apreciación cambiaria) y la incertidumbre general sobre el acuerdo con el FMI y el destino del programa económico de Caputo y compañía, las acciones del presidente revelan el trasfondo. Como señaló Fernando Rosso hace unas horas: “Hay método en su locura: la desesperación por inversiones que no hay”.

El Rey está desnudo. El gobierno de la Libertad Avanza se presenta como lo que es: una banda de estafadores. Las cartas están sobre la mesa.

Tramas.ar