Francia: Nuevamente masivas protestas contra las políticas neoliberales del régimen de Macron

Los sindicatos de Francia que convocaron a las movilizaciones contra la reforma a las jubilaciones amenazaron con parar el país el 7 de marzo si no se da marcha atrás al proyecto.

En una cuarta ronda de protestas contra la nueva reforma de las pensiones anunciada por el presidente Emmanuel Macron, cientos de miles de franceses salieron este sábado a las calles de las principales ciudades para exigir la cancelación del proyecto que se debate en el Congreso.

La marcha del sábado en París ha comenzado a las 13H00 horas locales y se ha desarrollado bajo represión policial. Algunos participantes han respondido arrojando piedras y botellas contra el dispositivo policial.

El suceso más destacable ha tenido lugar en el aeropuerto internacional de Orly, al sur de París, donde un paro sorpresa ha obligado a la cancelación de la mitad de los vuelos.

Los ocho principales sindicatos franceses también han declarado que están dispuestos a "paralizar Francia en todos los sectores el 7 de marzo" si el Gobierno y el Parlamento "siguen haciendo oídos sordos a la protesta popular".

El sindicato Confederación General del Trabajo (CGT) afirmó que más de 2,5 millones de personas salieron a las calles para la jornada de acción del sábado en toda Francia, 250.000 tan solo en París, tras la propuesta del régimen de Macron en enero de ampliar la edad de jubilación de 62 a los 64 años en 2030, entre otras medidas antipopulares de corte neoliberal.

El secretario general de la CGT, Philippe Martinez, instó esta semana a “subir el tono” de las protestas contra la reforma, alegando un aparente empeño del régimen en ignorar lo que sucede en las calles de Francia, donde el sábado hubo más de 200 manifestaciones.

Choques entre manifestantes y policías durante las protestas

En ciudades como París, Rennes y Nantes se produjeron enfrentamientos con la Policía que comenzó a reprimir a la manifestación pacífica. Algunos manifestantes respondieron tirando petardos y bombas incendiarias y rompiendo escaparates de tiendas de lujo.

En videos publicados en redes sociales se puede ver un coche volcado y fuegos ardiendo en las calles de París, así como varias personas heridas por la violencia represiva.

La Policía utilizó gases lacrimógenos para dispersar a la multitud que se manifestaba. La represión acabó con decenas de detenciones.