lahaine.org
Argentina :: 26/10/2010

La precarización y la burocracia sindical matan porque alguien lo permite

La fragua
En memoria de Mariano Ferreyra, Darío Santillán, Maximiliano Kosteki, Carlos Fuentealba y todos los caídos en las luchas del pueblo.

¿El Gobierno está preocupado? ¡Que empiece por casa!

o de La Fragua, agrupaciones de base de trabajadores/as asalariados/as en el Frente Popular Darío Santillán. 22 de octubre de 2010.

1. ¿Sinceridad o extremo cinismo?

Cristina Fernández de Kirchner -en la sede de la Unión Ferroviaria, junto a Pedraza- el 12 de noviembre de 2009 decía lo siguiente:

“Yo soy una profunda admiradora de nuestra organización sindical, de nuestra posibilidad de ser el primer país que mencionó la palabra trabajo decente, que es el trabajo registrado, el trabajo en blanco, con salarios dignos y derechos para los trabajadores”.

(…) “Mostrémosle a todos cuál es este modelo de organización sindical que cree que lo más importante no es destruir sino conseguir cosas y mejoras para sus trabajadores".

(…) “Por eso yo quiero, en esta tarde de realizaciones, en esta tarde donde venimos a inaugurar este fantástico lugar [la sede de la Unión Ferroviaria], agradecerles a todos los compañeros y a todas las compañeras el apoyo que siempre nos han dado y estoy absolutamente convencida que nos van a seguir dando; no porque les caigamos bien nosotros, no es una cuestión de simpatías personales o simplemente identidades partidarias compartidas, sino de intereses comunes que tenemos entre todos”.

Información tomada del sitio web de la Casa Rosada, el artículo tiene por título “PALABRAS DE LA PRESIDENTA CRISTINA FERNÁNDEZ EN LA INAUGURACIÓN DE OBRAS EN INSTALACIONES DE LA UNIÓN FERROVIARIA”. El link completo es http://www.casarosada.gov.ar/index.php?option=com_content&task=view&id=6596&Itemid=12

2. Un debate fundamental, sin posibilidad de medias tintas.

El asesinato de Mariano Ferreyra a manos de una patota sindical de la lista Verde, conducción de la Unión Ferroviaria (CGT) ha provocado indignación en miles y miles de personas en todo el país. No sólo por las prácticas de la burocracia sindical, puestas en evidencia como pocas veces. También por el contexto en que sucedió el hecho: una patota del gremio que debería defender a los trabajadores, atacándolos por defender sus derechos, vulnerados mediante la tercerización, uno de los últimos escalones de la precarización laboral.

Precisamente estos dos temas –la precarización, la burocracia sindical- constituyen el problema central que hoy tenemos la mayoría de los trabajadores. Y si esos problemas existen es porque alguien lo permite. Por acción e inacción: el gobierno es responsable de sostener políticas que favorecen la precarización (incluso en el propio Estado). Por complicidad económica y alianza política: el gobierno ha favorecido la existencia de estos burócratas, más preocupados en hacer negocios personales que en la realidad de los trabajadores.

Ante esto, es urgente que se termine el doble discurso: o se está con la democracia sindical y los derechos laborales, o se está con la burocracia y la precarización. Hasta el momento, en la realidad que existe más allá de los discursos de ocasión, el gobierno ha dejado claro de qué lado juega. No se trata de un tema secundario, como parecen entender muchos apoyos “progres” del gobierno, que justifican todo e intentan hamacarse cri0ticando a los “gordos”, buscando entre sus aliados a políticos reaccionarios pero omitiendo el apoyo recíproco respecto al gobierno. Ahora las cartas han quedado sobre la mesa, y no hay mucho margen para hacerse los distraídos. ¿La burocracia sindical es mala si el que está aliado a ella es Duhalde, pero es tolerable si tiene negocios y apoya a los Kirchner?

3. La precarización (“flexibilización”) laboral.

La flexibilización laboral fue junto a la desocupación la principal estrategia de las empresas y el Estado para fragmentar la clase trabajadora, debilitándola y avanzando sobre derechos conquistado con años de lucha y sangre de los trabajadores. Esa traición histórica fue posible por el acompañamiento de la mayor parte de la burocracia sindical y política, incluidos los Kirchner y muchos otros que en los 90 estaban con Menem y hoy se presentan como si nada de eso hubiera pasado. No es simplemente un lastre de los 90, como dicen los defensores de la CGT y del gobierno, como el diputado Recalde. Por el contrario, el proyecto K ha mantenido y en muchos casos potenciado esta situación.

En al actualidad, más del 40% de la fuerza de trabajo se encuentra “en negro” o con distintas formas de precarización laboral, y esa es una de las principales causas de la fragmentación y debilidad en los lugares de trabajo. Siete años de gobierno y crecimiento ininterrumpido no han bastado para revertir este panorama estructural. Porque más allá de los discursos y algunas políticas focalizadas, siempre en función de los acuerdos con los burócratas, no hay decisión política de impulsar otro modelo laboral y sindical. Esto es tan evidente que basta mirar qué hace el propio Estado en cuanto a sus relaciones laborales.

De acuerdo a los datos oficiales, hay casi 40.000 empleados precarizados sólo en el Estado nacional. Hasta en el propio Ministerio de Trabajo, ese que conduce el progresista ministro Tomada (quien fuera abogado de la Unión Ferroviaria y partícipe activo en la privatización de los ferrocarriles durante los noventa), cientos de compañeras y compañeros están precarizados, razón por la cual hasta ha surgido una agrupación que se llama “Empieza x Casa” y luego de años de lucha, hoy conduce el cuerpo de delegados de ATE. Esta realidad se repite y se agrava en todas las provincias, y ni hablar en los municipios. Por citar sólo un caso, en la Municipalidad de La Plata alrededor del 80% de la fuerza laboral está precarizada, llegando incluso al colmo de que parte del servicio de salud se garantice a través de falsas cooperativas de trabajo, que encubren la relación laboral.

Es decir, un panorama general en el que el propio Estado se negrea a sí mismo (por supuesto, a costa de los trabajadores y trabajadoras). Y en el que sólo se han logrado avances a partir de la dura lucha que damos los trabajadores, confrontando mediante acciones directas contra la acción de los sindicatos de la CGT y de los funcionarios del gobierno que se dicen “progre”.

4. La burocracia sindical-capitalista.

La burocracia sindical no es una novedad en la historia argentina: ahí está su papel como buchones de la dictadura, e incluso antes, como parte de la Triple A, cuando enfrentaban con los sectores populares dentro y fuera del peronismo (y uno de sus espacios era la Juventud Sindical Peronista, que ahora la presidente elogia).

Pero es en los 90 cuando su papel se degrada al máximo, reconvirtiéndose como socios de los capitalistas en la privatización de empresas del Estado. A partir de allí se generalizan los negociados con tercerizadas, obras sociales, etcétera.

El caso de Ferrocarriles no es ni remotamente el único, pero es paradigmático y dramáticamente actual. Alrededor de 20 empresas contratistas emplean a unos 1.500 trabajadores, que tienen un convenio colectivo distinto al que les corresponde, con sueldos mucho menores, peores condiciones laborales y sujetos a ser despedidos en cualquier momento. ¿Por qué sucede esto? Porque es lo que permiten los negocios entre los funcionarios del Estado y los jefes sindicales dueños de las empresas fantasmas. El Estado otorga subsidios millonarios, las contratistas inflan las plantillas del personal al mismo tiempo que bajan los costos con salarios de hambre y precarización, y la diferencia se la reparten. Algunas estimaciones hablan de un negocio donde quedan “limpios” unos 3 millones de pesos al mes[1] [Unos 750.000 dólares].

Recordemos que el secretario general de la Unión Ferroviaria, Pedraza, es socio del senador Urquía y de los Macri en el Belgrano Cargas. Por otro lado, el modelo de empresario nacional Taselli, amigo de Néstor y responsable de la muerte de los obreros de Río Turbio, era dueño de TBA hasta 2007, desde donde compartía negocios con la burocracia sindical. El mismo Pedraza es quien mandó sus muchachos al acto de Moyano del viernes 15 en River. Él no fue porque, según dicen, estaba en Europa (¡como hace cualquier trabajador ferroviario!). No es un secreto que, además, esta misma burocracia, con este mismo secretario general, bancó el desguace del ferrocarril en tiempos de Menem. Como los Kirchner y su secretario privado Parrilli apoyaron la privatización de YPF. Demasiadas coincidencias para aparentar inocencia o decir “qué barbaridad”.

Este poder –de apretar, de hacer negocios- se mantiene básicamente a partir de un modelo sindical verticalista, mediante el cual las organizaciones de base de los lugares de trabajo, para negociar legalmente con la patronal, se tienen que subordinar a las comisiones directivas centrales, que además manejan con exclusividad los fondos que son de los trabajadores sin ningún mecanismo de participación real. Está claro que la unidad es un valor a construir, pero la unidad con la participación activa, en la lucha, no el disciplinamiento que se vuelve sobre el conjunto de los trabajadores para que los dirigentes se forren de dinero a sus expensas.

5. Sobran las razones para seguir en la lucha.

La lucha actual que llevamos adelante miles de compañeros y compañeras, desde la base, contra la precarización y la burocracia, se suma a la de generaciones enteras que han luchado para que hoy tengamos mejores condiciones de trabajo. Somos la continuidad de una historia que, así como tiene burócratas entreguistas, también tiene a Agustín Tosco, a Felipe Vallese, a Víctor Choque, a Carlos Fuentealba, a Darío, a Maxi, a Mariano y a tantos otros y otras.

Hace un siglo podía parecer utópico pensar en 8 horas de trabajo, en obra social, vacaciones pagas, asociación sindical, prohibición del trabajo infantil, jubilaciones dignas, contratos en blanco. Sin embargo, la clase trabajadora ha sido capaz de avanzar en organización y conquistas que se han convertido en nuevos pisos para la lucha por vivir mejor. Siempre confrontando con un sistema capitalista que intenta que seamos muertos en vida, sólo disponibles para que los patrones vivan de la parte del valor que generamos y nos expropian.

Por eso nuestra lucha es desde ahora, por todas las reformas que podamos pero en la perspectiva de un cambio social profundo. Un cambio desde la raíz de las actuales relaciones sociales de producción, que sólo generan ricos más ricos y pobres más pobres, que amenazan seriamente la Madre Tierra y por lo tanto las posibilidades de reproducción de la vida. Un sistema capitalista que no es posible emparchar para que todos y todas vivamos bien.

En esa lucha estamos, por eso nos unimos y organizamos desde la base, y todos los días peleamos en nuestros lugares de trabajo por acercarnos a ese objetivo.

- Basta de tercerización y de toda forma de precarización laboral.

- Pase a planta permanente de los trabajadores y trabajadoras precarizados (tercerizados, contratados, “becarios”, monotributistas, “cooperativizados” y todos los nombres que les quieran dar para ocultar el fraude laboral).

- Esclarecimiento inmediato del crimen. Juicio y Castigo a los asesinos de Mariano Ferreyra.

- Libertad y democracia sindical. Reconocimiento de las comisiones internas y cuerpos de delegados como los genuinos representantes en los conflictos. Elección desde la base de las comisiones ejecutivas de los sindicatos y centrales sindicales. Respeto a la voluntad de los afiliados, sin fraudes ni patotas.

- Unidad del pueblo trabajador en lucha por otra sociedad, sin explotadores ni explotados.


La fragua - Frente Popular Darío Santillán en la COMPA (Coordinadora de Organizaciones y Movimientos Populares de Argentina)

* La fragua es un espacio de trabajadores/as agrupados/as, con compañeras y compañeros de Río Negro, Neuquén, Jujuy, Formosa, Rosario, Córdoba, San Luis, Necochea, La Plata, Berisso, Ensenada, Esteban Echeverría, Ezeiza, La Matanza, San Martín, Tres de Febrero y la Ciudad de Buenos Aires. Confluimos con movimientos barriales, estudiantiles, rurales, ambientales, de cultura y comunicación en el Frente Popular Darío Santillán, y desde allí, con otras organizaciones populares en la COMPA. A nivel sindical participamos de la Corriente Rompiendo Cadenas.

Correo electrónico: lafragua.fpds@gmail.com

www.lafragua-fpds.blogspot.com

 

Contactar con La Haine

 

Este sitio web utiliza 'cookies'. Si continúas navegando estás dando tu consentimiento para la aceptación de las mencionadas 'cookies' y la aceptación de nuestra política de 'cookies'.
o

La Haine - Proyecto de desobediencia informativa, acción directa y revolución social

::  [ Acerca de La Haine ]    [ Nota legal ]    Creative Commons License ::

Principal