Lavrov rompe la baraja en Nueva York

Ahora imagínese a un verdadero caballero, el diplomático más destacado de estos tiempos difíciles, con total dominio de los hechos y dotado de un delicioso sentido del humor, dando un peligroso paseo por el lado salvaje, para citar al icónico Lou Reed, y saliendo ileso.

De hecho, el momento de Nueva York del Ministro de Relaciones Exteriores ruso Sergey Lavrov, como en sus dos intervenciones ante el Consejo de Seguridad de la ONU el 24 y 25 de abril, representó el equivalente diplomático de derribar la casa. Al menos las secciones de la casa habitadas por el Sur Global, o la Mayoría Global.

El 24 de abril, durante la reunión 9308 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas bajo la agenda “Mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, multilateralismo efectivo a través de la protección de los principios de la Carta de la ONU”, fue particularmente relevante.

Lavrov enfatizó el simbolismo de la reunión en el Día Internacional del Multilateralismo y la Diplomacia para la Paz, considerado bastante significativo por una resolución de la Asamblea General de la ONU de 2018.

En su preámbulo, Lavrov señaló que “en dos semanas celebraremos el 78 aniversario de la Victoria en la II Guerra Mundial. La derrota de la Alemania nazi, a la que mi país contribuyó decisivamente con el apoyo de los Aliados, sentó las bases del orden internacional de la posguerra. La Carta de la ONU se ha convertido en su base legal y nuestra propia organización, que encarna el verdadero multilateralismo, ha adquirido un papel central de coordinación en la política mundial”.

Bueno, en realidad no. Y eso nos lleva al verdadero paseo por el lado salvaje de Lavrov, señalando cómo se ha pisoteado el multilateralismo. Mucho más allá de los torrentes de denigración por parte de los sospechosos habituales, y su intento de someterlo a una ducha helada en Nueva York, o incluso confinarlo en el congelador geopolítico, el ruso prevaleció. Demos un paseo con él por el páramo actual. Sr. Lavrov, usted es la estrella del espectáculo.

Nuestro camino o la puta calle

Ese 'orden basado en reglas': “El sistema centrado en la ONU atraviesa una profunda crisis. La causa raíz fue el deseo de algunos miembros de nuestra organización de reemplazar el derecho internacional y la Carta de la ONU con un pretendido 'orden basado en reglas'. Nadie ha visto estas 'reglas'. No fueron objeto de negociaciones internacionales transparentes. Se inventan y utilizan para contrarrestar los procesos naturales de formación de nuevos centros independientes de desarrollo, que son una manifestación objetiva del multilateralismo. Están tratando de contenerlos con medidas unilaterales ilegítimas, que incluyen cortar el acceso a tecnologías modernas y servicios financieros, expulsarlos de las cadenas de suministro, confiscar propiedades, destruir la infraestructura crítica de los competidores y manipular normas y procedimientos universalmente acordados".

Como resultado, destruyen la globalización: “En un intento desesperado por afirmar su dominio castigando a los desobedientes, EEUU pasó a destruir la globalización, que durante muchos años fue ensalzada como el mayor bien de toda la humanidad, al servicio del sistema multilateral de la economía mundial. Washington y el resto de Occidente, que se ha sometido a ellos, utilizan sus 'reglas' siempre que es necesario para justificar pasos ilegítimos contra quienes construyen sus políticas de acuerdo con el derecho internacional y se niegan a seguir los intereses egoístas de los 'mil millones en oro'. Los disidentes se incluyen en la lista negra de acuerdo con el principio 'Quien no está con nosotros está contra nosotros'. Durante mucho tiempo ha sido 'inconveniente' para nuestros colegas occidentales negociar en formatos universales, como la ONU. Para la justificación ideológica de la política de socavamiento del multilateralismo se ha introducido el tema de la unidad de las 'democracias' en oposición a las 'autocracias'. Además de las 'cumbres por la democracia', cuya composición está determinada por el autoproclamado Hegemón, se están creando otros 'clubes de élite', sin pasar por la ONU”.

'Jardín' vs. 'Selva': “Llamemos a las cosas por su nombre: nadie autorizó que la minoría occidental hablara en nombre de toda la humanidad. Es necesario comportarse decentemente y respetar a todos los miembros de la comunidad internacional. Al imponer su 'orden basado en reglas', rechazan con arrogancia un principio clave de la Carta de la ONU: la igualdad soberana de los estados. La quintaesencia del 'complejo de exclusividad' fue la declaración orgullosa del jefe de la diplomacia de la UE, Josep Borrell, de que 'Europa es el Jardín del Edén, y el resto del mundo es una jungla'. Citaré también la Declaración Conjunta OTAN-UE del 10 de enero de este año, que dice: 'Occidente Unido utilizará todas las herramientas económicas, financieras, políticas y -presto especial atención- militares a disposición de la OTAN y la UE para asegurar los intereses de 'nuestros mil millones'".

La 'línea de defensa' de la OTAN: “En la cumbre del año pasado en Madrid, la OTAN, que siempre ha proclamado ante todos su 'pacifismo' y el carácter exclusivamente defensivo de sus programas militares, declaró la 'responsabilidad global' y la 'indivisibilidad de la seguridad' en la región euroatlántica y en la llamada región del Indo-Pacífico. Es decir, ahora la 'línea de defensa' de la OTAN (como Alianza defensiva) se está desplazando hacia las costas occidentales del Océano Pacífico. Los enfoques de bloque que socavan el multilateralismo centrado en la ASEAN se manifiestan en la creación de la alianza militar AUKUS, a la que están siendo empujados Tokio, Seúl y varios países de la ASEAN. Bajo los auspicios de EEUU, se están creando mecanismos para intervenir en cuestiones de seguridad marítima con miras a garantizar los intereses unilaterales de Occidente en el Mar de China Meridional. Josep Borrell, a quien ya he citado hoy, propuso ayer enviar fuerzas navales de la UE a la región. No se oculta que el objetivo de las 'estrategias del Indo-Pacífico' es contener a la República Popular China y aislar a Rusia. Así es como nuestros colegas occidentales entienden el 'multilateralismo efectivo' en la región de Asia-Pacífico”.

'Promover la democracia': “Desde la II Guerra Mundial, ha habido docenas de aventuras militares criminales por parte de Washington, sin ningún intento de obtener legitimidad multilateral. ¿Para qué, si hay 'reglas' desconocidas para cualquiera? La vergonzosa invasión de Irak por parte de la coalición liderada por EEUU en 2003 se llevó a cabo en violación de la Carta de la ONU, al igual que la agresión contra Libia en 2011. Una grave violación de la Carta de la ONU fue la injerencia de EEUU en los asuntos de los estados postsoviéticos. Se han organizado 'revoluciones de color' en Georgia y Kirguistán, un sangriento golpe de estado en Kiev en febrero de 2014, e intentos de tomar el poder por la fuerza en Bielorrusia en 2020. Los anglosajones, que lideran con confianza todo Occidente, no solo justifican todas estas aventuras criminales, sino que también hacen alarde de su línea de 'promover la democracia'. Pero de nuevo, según sus 'reglas': Kosovo: reconocer la independencia sin referéndum; Crimea: no reconocerla, aunque hubo un referéndum; no toques las Malvinas, porque allí hubo un referéndum, como dijo recientemente el canciller británico John Cleverly. Es gracioso."

La geopolítica del 'problema ucraniano': “Hoy todos lo entienden, aunque no todos hablan de ello en voz alta: no se trata de Ucrania en absoluto, sino de cómo se desarrollarán las relaciones internacionales. A través de la formación de un consenso estable basado en un equilibrio de intereses, o mediante la promoción agresiva y explosiva de la hegemonía. Es imposible considerar el 'problema ucraniano' aisladamente del contexto geopolítico. El multilateralismo presupone el respeto por la Carta de las Naciones Unidas en toda la interconexión de sus principios, como se mencionó anteriormente. Rusia ha explicado claramente las tareas que persigue como parte de una operación militar especial (OME): eliminar las amenazas a nuestra seguridad creadas por los miembros de la OTAN directamente en nuestras fronteras y para proteger a las personas que han sido privadas de sus derechos proclamados por convenciones multilaterales, para protegerlos de las amenazas directas de exterminio y expulsión de los territorios donde vivieron sus antepasados durante siglos, declarado públicamente por el régimen de Kiev. Honestamente dijimos por qué y por quién estamos luchando”.

El Sur Global contraataca: “El verdadero multilateralismo en la etapa actual requiere que la ONU se adapte a las tendencias objetivas en la formación de una arquitectura multipolar de relaciones internacionales. La reforma del Consejo de Seguridad debe acelerarse, aumentando la representación de países de Asia, África y América Latina. La escandalosa sobrerrepresentación actual de Occidente en este órgano principal de la ONU socava el multilateralismo. Por iniciativa de Venezuela se creó el Grupo de Amigos en Defensa de la Carta de la ONU. Hacemos un llamado a todos los Estados que respetan la Carta a unirse a ella. También es importante utilizar el potencial constructivo de los BRICS y la OCS. La EAEU, la CIS y la CSTO están listas para contribuir. Estamos a favor de utilizar la iniciativa de las asociaciones regionales de los países del Sur Global".

Entonces, ¿quién está violando la ley?

Después de este conciso 'tour de force', sería inmensamente esclarecedor rastrear lo que Lavrov le ha estado diciendo al mundo desde febrero de 2022, con detalles constantes e insoportables: los infractores en serie de la ley internacional, en la historia contemporánea, han sido el Hegemon y su lamentable manada de vasallos. No Rusia.

Así que Moscú estaba completamente en su derecho de lanzar la OME, ya que no tenía alternativa. Y esa operación se llevará a su conclusión lógica, incorporada en el nuevo Concepto de Política Exterior de Rusia publicado el 31 de marzo. Rusia simplemente ignorará todo lo que pueda desatar el Occidente Colectivo, ya que considera que todo el combo está actuando fuera de las normas del derecho internacional establecidas en la Carta de la ONU.

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