Los medios y el progresismo: disparen contra los estudiantes y la izquierda

"Y ahora, los respetuosos "nacionalistas", liberales, beatos, rotarianos, empresarios, gerentes del imperialismo, "dirigentes obreros" y peronistas burgueses han encontrado que sólo tenían, en realidad, unos pocos enemigos: la Universidad, la izquierda, los "extremistas de izquierda". Sacando a éstos, desaparecía el problema"
J. W. Cooke

La cobertura de los medios de comunicación sobre los hechos ocurridos en torno a la Asamblea Universitaria fue unánime: los estudiantes encapuchados y arrojando piedras con la mano y con gomeras contra policías que apenas osaban defenderse de semejante vandalismo. Esas imágenes están en función de la construcción de un discurso condenatorio en base a prejuicios infundados que permiten una rápida estigmatización: "no son estudiantes". ¿Cómo lo sabe, señor periodista? "Son minorías" ¿En qué fuentes se basa, las elecciones universitarias así lo indican? Al paroxismo, como siempre, llegó un periodista de Clarín que comentando una foto señalaba en tono policíaco, "Cuesta creer que el barbado de la foto tenga intenciones de aportar algo para una Universidad mejor". Todo esto va acompañado de la desinformación que evita aportar cualquier información sustancial sobre el debate de la democratización de los órganos de co-gobierno en la Universidad, cuyos pormenores, este periodista afeitado o imberbe es probable que desconozca.

Los que hablan de violencia no consideran violento el inusitado dispositivo policial para realizar una Asamblea Universitaria, violando la automomía y la reglamentación de los estatutos universitarios. Los Consejeros Estudiantiles tuvimos que atravesar 3 vallados policiales en medio de un trato penitenciario y finalmente fuimos golpeados por los mercenarios de la Seguridad del Congreso de la Nación. Los policías y los patoteros del Congreso que nos agredieron y golpearon no tienen ni la menor idea de lo que pasa en la Universidad Pública, no los votó nadie, ni representan a nadie. Sin embargo fueron quienes controlaron el acceso a la Asamblea Universitaria. Pero claro, eso no es ni anti-democrático, ni violento.

El mecanismo de estigmatización que utilizan los medios de comunicación contra los estudiantes en lucha es el mismo que han usado contra el movimiento piquetero en general, o puntualmente contra figuras como Luis D´Elia y Milagros Sala, entre otros. Pero en este caso a la aversión visceral que sienten contra todo lo que tenga algún olor popular, se le suma el macartismo, del que participa, lamentablemente, buena parte sino todo el espectro del progresismo, en particular el kirchnerista.

Las descalificaciones apriorísticas son las que impiden referirse a los verdaderos reclamos. Porque lo que se reclama es la democratización del co-gobierno y no otra cosa. Un 0,5 % de la comunidad universitaria maneja los destinos de la Universidad, y los estudiantes estamos pintados. Gracias a esta democracia censataria, una aristocracia profesoral hace negocios con la educación pública y se enriquece ilícitamente a través de meter la mano en la caja y de los convenios con las empresas privadas. ¿Usted piensa que el Rector Hallú defiende con tanta vehemencia su cargo por mera vocación democrática? ¿Usted piensa que ese grupo mafioso de negocios privados que se hace pasar por una agrupación estudiantil, como es la Franja Morada -"Nuevo Espacio" con su base de operaciones en Ciencias Económicas, pretende defender la "calidad institucional" de la Universidad Pública?.

No todas las agrupaciones que participamos de esta lucha compartimos ideologías ni perspectivas políticas, en las que más bien tendemos a tener importantes y probablemente irreconciliables desacuerdos. Quienes ubican en este gobierno expectativas progresistas e inclusive un camino de liberación, podrían participar de esta lucha con sus propias ideas y propuestas. Pero no lo hacen. No sólo porque el gobierno nacional tiene un compromiso con el Rector Hallú, a quien generosamente le ha prestado las instalaciones del Congreso con matones incluídos y los servicios de nuestra honorable Policía Federal Argentina, sino porque parece que para ciertos sectores cualquier reclamo encabezado por la izquierda es ilegítimo per se. Un macartismo lamentable, que no hace honor a nuestros 30 mil desparecidos. Bajo ese mismo criterio, están haciendo lo posible para regalarle la FUBA a los radicales que quieren alinear a la UBA con "el campo", con tal de que no esté en manos de la izquierda. No deja de resultar curioso este proceder en aquellos que siempre nos convocan a utilizar el criterio del "mal menor".

Los agrupaciones que protagonizamos esta lucha tenemos representación entre los estudiantes de la UBA, conducimos la mayoría de los Centros de Estudiantes y obtuvimos la mayoría de los Consejeros Directivos que nos permitió acceder a 4 de los 5 Consejeros Superiores, contra uno solo de la Franja Morada y ninguno de las corrientes kirchneristas. Somos representativos, le guste o no le guste a los radicales, a los medios y al gobierno. Y no sólo que somos estudiantes: somos mucho más estudiantes que "periodistas" algunos operadores de los monopolios privados; mucho más estudiantes que "democrática" alguna clase media con aires fascistas; mucho más estudiantes que "productores" algunos propietarios ausentistas; mucho más estudiantes que "trabajadores" algunos burócratas sindicales millonarios, y, sobre todo, mucho más estudiantes que "setentistas" algunos Anibales Fernandez. Somos los estudiantes que vamos a democratizar la UBA.

Juan Pedro Denaday
Consejero Estudiantil
Facultad de Filosofía y Letras - UBA

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