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Europa :: 13/03/2006

Milosevic: La muerte deseada

José Paulo Gascão
La muerte de Slobodan Milosevic, aunque haya sido por causas naturales, no es una muerte natural. Es una muerte prevista y deseada, en la que todo se hizo para no evitarla.

Los jueces del tribunal de La Haya mostraron, una vez más, cuales eran sus objetivos y procedimientos cuando el 29 de noviembre de 2005 el TPI no atendió los pareceres de las dos juntas médicas (ver acta de la sesión del TPI de 29 de noviembre, Milosevic no tribunal da NATO: quando os criminosos se arvoram em juízes).

Hasta la junta nombrada por el TPI, entre médicos de su confianza, recomendó "vivamente medidas para un reposo adecuado" de Milosevic, debido a su estado de salud. Aunque le pareciese que el período de reposo de seis semanas (tiempo recomendado por la junta médica que inicialmente y a su pedido vió a Milosevic) "era un tanto largo".

Con la muerte de Milosevic, provocada por la negligencia de los jueces pagados por la OTAN, patrocinadora del Tribunal y del juicio, el TPI se exime de un deber de todo y cualquier tribunal: decidir sobre todos los casos que le son presentados.

La muerte de Milosevic impide la sentencia, pues ya no existe reo, evitandose también la continuación del análisis de la enorme parcialidad de los jueces.

resistir.info


Traducido por La Haine

 

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