Santiago: El gobierno progresista reprimió ayer a los manifestantes por el 11S
La Coordinadora Nacional de Organizaciones de DDHH y Sociales convocó a la tradicional romería que se realiza cada año en homenaje a las víctimas de la dictadura. La movilización estuvo marcada por el impedimento a que organizaciones no afines al Gobierno marcharan durante un tramo para que Boric pudiera participar en la actividad.
Chile conmemora este 11 de septiembre 50 años del golpe de Estado contra el Gobierno constitucional del socialista Salvador Allende (1970-1973). De acuerdo con distintas Comisiones de Verdad, la cifra total de víctimas calificadas oficialmente es de 40.175 personas, incluyendo ejecutados políticos, detenidos, desaparecidos y víctimas de prisión política y tortura.
A las 9:30 horas de ayer 10 de septiembre miles de personas se reunieron en la sede de la Central Unitaria de Trabajadores, ubicada en la avenida O'Higgins, principal arteria de Santiago, y que se encuentra a pasos del Palacio de La Moneda, sede del ejecutivo. Por primera vez, el acceso para participar en la romería fue cerrado por Carabineros (policía militarizada), y solo se permitió el ingreso a ciertas organizaciones de DDHH y a militantes de partidos oficialistas.
"Hay una cuestión que no se puede dejar pasar y es que el Gobierno atentó contra las organizaciones, ya sean sociales, de DDHH o políticas que no pertenezcan al oficialismo solo por el gusto de hacer marchar al propio presidente Boric y eso atenta contra toda la lógica", dijo a Sputnik Dauno Totoro, dirigente del El Partido de Trabajadores Revolucionarios (PTR).
"Atenta contra toda la tradición de una marcha que es histórica y que no le pertenece al Gobierno. Esta es una marcha de todos quienes se reivindican de izquierda y que defienden los DDHH", agregó el dirigente del PTR.
La romería avanzó por la principal artería de Santiago hasta la calle Morandé, a un costado de La Moneda. En ese lugar, el presidente chileno Gabriel Boric y varios de sus ministros de Estado se unieron a la movilización protegidos por carabineros.
"Hoy los familiares de los detenidos desaparecidos, torturados y ejecutados políticos por la Dictadura participaron en una marcha en que después de mucho tiempo se autorizó el paso por Morandé 80", dijo el mandatario a través de sus redes sociales. El 11 de septiembre de 1973, y tras el intenso bombardeo por parte de la Fuerza Área, por la puerta de Morandé 80 evacuaron a quienes se encontraban en La Moneda. Desde esa misma puerta, fue sacado por militares el cadáver de Salvador Allende tras consumarse el golpe de Estado.
Mientras Boric y sus ministros se unían a la romería, miles de personas que fueron impedidas de participar del homenaje a las víctimas de la dictadura se enfrentaron con la policía que las reprimía en las inmediaciones del lugar.
Para Victor Hugo Robles, reconocido periodista chileno y activista histórico de la diversidad sexual, es "una vergüenza que las organizaciones de DDHH, y particularmente el Partido Comunista, hayan tramado esta encerrona al pueblo movilizado para permitirle al delirante presidente Boric que se sumara usando y abusando de las demandas de los DDHH".
"Me parece que es una situación inaceptable, diría que insólita, de cómo este Gobierno que se dice de izquierda decidió reprimir de esa manera una marcha que es tradicional de homenaje precisamente a las y los caídos, producto de la represión", comentó Totoro.
Una fuerte represión
La movilización en homenaje a las víctimas de la dictadura fue fuertemente reprimida por Carabineros en algunos puntos. La policía militarizada utilizó sus carros lanza aguas, lanza gases lacrimógenos y también gas pimienta en contra de manifestantes. "La represión que se ha vivido en esta marcha es orden expresa del ministerio del Interior, es orden de este Gobierno. Un Gobierno a quien hago responsable de toda la represión que se ha vivido en esta marcha", dijo Robles.
A diferencia de otras oportunidades, la romería sufrió desvíos y la policía no permitió a los asistentes ingresar por la tradicional puerta de avenida Recoleta y que da directamente con el memorial de ejecutados políticos y detenidos desaparecidos durante la dictadura cívico-militar.
"No pudimos ingresar por la entrada tradicional producto de un despliegue represivo enorme. El cementerio estaba prácticamente copado por Carabineros", señaló Totoro.
Tras la violenta represión en el interior del Cementerio General, se produjeron graves enfrentamientos entre manifestantes y Carabineros. Producto del excesivo uso de gas lacrimógeno, cientos de personas, principalmente adultos mayores, debieron abandonar el lugar sin poder rendir homenaje a sus familiares.
"¿Hay alguna diferencia entre este Gobierno y los anteriores en el trato hacia las organizaciones que marchan en este día tan importante? La represión es excesiva en todos", concluyó Totoro.
Sputnik / La Haine