Temblores en la cúpula

Aplastando a las organizaciones territoriales, desregulando la economía para favorecer el ingreso y la salida de capitales y creando un basamento legal para intensificar el saqueo. Sobre ese terreno ganado a los trabajadores, a los millones de precarizados y a la soberanía nacional, ha explotado una interna, que hace a la orientación de la nueva etapa, y a la sucesión en 2027.

El alejamiento del macrismo, de la UCR y de los colaboracionista federales (derechas varias) del gobierno de Milei, permite a la oposición ganar pequeñas batallas parlamentarias como la de los fondos reservados o la actualización jubilatoria, y hacer enojar a Milei, pero no debemos engañarnos. Poco puede esperarse de las políticas cupulares.

Los tropiezos de Milei

El gobierno de Milei está perdiendo impulso porque no ha podido resolver la provisión de fondos frescos en divisas que le permitan afrontar los compromisos externos que deberá pagar en lo que resta de 2024 y en el año próximo. También, porque su apuesta por Donald Trump, ya no es tan segura como hace unos meses. El relevo del decrépito Joe Biden por Kamala Harris ha mejorado los chances de los demócratas, que están mejorando en las encuestas y pueden dar la sorpresa en las elecciones de noviembre.

También las encuestas de la Argentina han empezado a preocupar a Milei. Más de la mitad de los habitantes de este país piensan que su gestión es mala o muy mala. Solo un 42%, la valoran como buena o muy buena. El resto piensa que es regular. La inflación ha dejado ser el problema mas preocupante, para ser desplazada por la preocupación por llegar a fin de mes y por mantener el trabajo. No se ve en el horizonte una recuperación de salarios, ni una mejora en el empleo.

La decisión de Macri de salir a enfrentar a Milei va mucho más allá de los enconos personales. Se entiende porque el actual presidente es su más inmediato rival en el espacio de la derecha, en la elección presidencial de 2027. Sin embargo, después de que se comieran juntos unas milanesas, Macri volvió a dar otro giro y terminó apoyando el veto presidencial a la actualización jubilatoria. No se sabe qué le hizo cambiar de opinión. Algunos piensan que fue un carpetazo que dejó muy preocupado al ex-presidente. Otros piensan que simplemente le ofreció darle una mano para que deje de preocuparse por los dos temas que más lo inquietan: el juicio por el Correo, o tener el control de la Hidrovía Paraná.

Oxigeno para Unión por la Patria

El giro de Macri fue una bendición para Unión por la Patria (peronista) que venía muy golpeada por los zafarranchos del ex-presidente Fernández, recientemente descubiertos e hiperpublicitados por la prensa de derecha. La zaga de las aventuras de Alberto tiene muchos capítulos y el poder mediático-judicial hegemónico los va mostrando de a poco. Se dice por ejemplo, que tendría 24 videos grabados. El ex presidente ha demostrado que pertenece a la especie de quienes arrugan con los poderosos pero le pegan a sus mujeres.

Pero además, y siguiendo las definiciones de la “sexóloga” Moria Casan, ha demostrado cierta propensión pajeril que lo convierte en muy vulnerable con sus enemigos. Las aventuras de Fernández no han golpeado exclusivamente a su sector dentro de peronismo, sino también a Cristina Fernández que, después del fallecimiento de su marido, ha demostrado poca lucidez a la hora de elegir candidatos.

El declive de la referencia de Cristina se advierte en la poca resonancia que está teniendo el juicio por su intento de asesinato. Solo basta comparar su caso con la cantidad de movilizaciones realizadas y de las personas que salieron a la calle exigiendo que aparezcan los autores intelectuales del asesinato de Darío y Maxi. De hecho, esas movilizaciones retiraron a Duhalde de la política. No creo que en el caso de Cristina le cuesten la cabeza a nadie.

Los triunfos obtenidos al rechazar los gastos reservados de la SIDE (inteligencia del Estado) e imponer una actualización jubilatoria han levantado la autoestima peronista, pero va necesitar mucho oxigeno para aguantar tanta golpiza. Después de los 24 videos de Fernández, se iniciará la serie La Matanza, que puede dar lugar a una zaga de dos temporadas y 16 capítulos de Netflix.

Hoy por hoy, la única carta fuerte de Unión por la Patria es el fortín bonaerense de Kicillof, que por ahora resiste el asedio del gobierno nacional que estrangula sus ingresos. Allí se están refugiando o golpeando la puerta muchos despedidos y despedidas por Milei de áreas nacionales.

Sin que aparezca por ahora nadie que le dispute a Kicilloff una eventual candidatura presidencial, resta saber si la lapicera para elegir legisladores en la provincia de Buenos Aires la va a seguir usando Cristina, o el futuro candidato. La elección de medio termino adelanta ese conflicto. La intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, es la mejor carta de la Campora. ¿Encabezará la lista de legisladoras para después ser candidata a Gobernadora?

Kicilloff, tiene otros planes, y está tejiendo otros compromisos. Maneja estadísticas que dicen que los votos que pierde Milei están regresando al peronismo. Por ahora, su mayor preocupación es que si hay un estallido, no sea un su provincia. Los sindicatos Ate (estatales), Suteba (educación), y los gremios universitarios ligados al gobernador deben hacer equilibrio entre responder a las demandas de sus bases y evitar que la calle se recaliente. Veremos cómo sigue.

Por el lado de la CGT, los gordos se ven cada vez más complicados para explicar por qué no toman medidas de fuerza para enfrentar los despidos y el crecimiento de la pobreza y la indigencia. Los más duros, que también están cruzados por la interna bonaerense, por ahora no se han puesto de acuerdo para presionar en conjunto.

Haciendo equilibrio

Radicales, lilitos y pichetistas (derecha) también leen encuestas y viendo que el apoyo a las políticas de ajuste se angosta, pretenden acompañar los cambios de humor social.

Haciendo los deberes de no cuestionar el primer DNU y votar la Ley Bases, ahora pretenden demostrar que también pueden ser opositores y que les preocupan los abuelitos y el aumento del poder de la SIDE. Preocupados porque el barco del gobierno naufrague transitan los pasillos parlamentarios con el salvavidas puesto.

La calma que precede a la tormenta

Las tensiones en la cúpula se han expresado en la exposición pública de las peleas entre Milei y la vicepresidenta Villarruel, en los escándalos dentro del bloque 'libertario' y por un agravamiento de las disputas hacia el interior del PRO, pero, por ahora, esas fisuras no han sido aprovechadas por un incremento de la protesta social.

La población argentina que se sume cotidianamente en el fango de la precarización de sus condiciones de vida, que es testigo cotidiano del deambular de los desempleados reconvertidos como cartoneros o mendigos y el cada vez más presente flagelo del hambre, parece apaleada. La secuencia de conflictos sociales y laborales se ha reducido en los últimos meses.

El gobierno es defendido por las redes de 'trolls' e 'influencers' a su servicio, pero cada vez parece tener menos partidarios. La vida cotidiana parece estar signada por el murmullo de los de abajo, que más bien parecen estar mascullando su decepción y su bronca. Milei genera cada vez menos gracia o entusiasmo. Cada vez hay menos personas pendientes de los que dice, hace o deja de hacer Cristina. El país parece una gigantesca olla a presión que inevitablemente explotará, pero no hay plazos, ni fechas precisas para la ocurrencia de este evento.

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