Una ola feminista se manifiesta contra el patriarcado y la ultraderecha en América Latina

Cientos de miles de mujeres y personas LGTBIQ+ se han manifestado este sábado 8 de marzo en las principales ciudades de América Latina en repudio de la violencia machista y contra la ola reaccionaria encabezada en la región por el presidente de Argentina, Javier Milei.
Una de las movilizaciones más multitudinarias desfiló precisamente hacia la Plaza de Mayo de Buenos Aires “contra el fascismo, el racismo, el patriarcado y el capitalismo”. La organización Ni Una Menos llamó a “enfrentar la ultraderecha que gobierna con hambre, a golpe de saqueo y crueldad”. “La estafa de Milei tiene réplicas en el mundo y cosecha aplausos de los multimillonarios”, escribió el colectivo en sus redes sociales en referencia a la guerra cultural emprendida por Trump y Musk en EEUU y la derecha europea.
Un grupo de mujeres respondió a la violencia fe la policía en las afueras de la Casa Rosada en Buenos Aires.
Las marchas del Día Internacional de la Mujer en Argentina tienen este año como antecedente la multitudinaria manifestación del pasado 1 de febrero convocada para rechazar la intervención de Milei en el Foro Económico Mundial de Davos, donde lanzó una ofensiva contra las políticas de igualdad al hablar de la “nefasta ideología de género” y contra lo que llama “feminismo radical” y hasta vinculó a la homosexualidad con la pedofilia. Días después, Milei avanzó que pediría al Congreso el fin de la figura de feminicidio y las leyes de paridad de género.
Las chilenas también se sumaron a la la convocatoria contra la agenda ultraconservadora. Miles de personas reclamaron en Santiago al Gobierno supuestamente progresista de Gabriel Boric, el primero en América Latina en declararse “feminista” (pero sólo de las blancas), una mayor profundización de las luchas de género y contra el racismo antimapuche, y abrir el debate sobre el aborto libre, todavía un tabú para la mayoría de la derecha.
Manifestación en Santiago de Chile.
“Las mujeres y disidencias seguimos siendo el movimiento social más convocante de Chile. En Santiago, solo en la mañana, medio millón de personas hemos salido a la calle contra la ofensiva fascista de la ultraderecha y para seguir impulsado transformaciones profundas”, dijo la portavoz de la Coordinadora Feminista 8M y de la Articulación por la Huelga General Feminista 2025, Javiera Mena. “Marchamos hoy señalando también a un Gobierno que ha priorizado la impunidad y la agenda represiva antes que el aborto legal, las pensiones dignas y el derecho a la vivienda”, prosiguió.
En Perú, el movimiento feminista centró sus demandas contra el régimen dictatorial de Dina Boluarte y el Congreso, una de las instituciones más desprestigiadas del país, que estuvo envuelta en los últimos meses en un escándalo de prostitución. Rocío Gutiérrez, una de las voceras de la movilización, subrayó que una prueba del retroceso es la intención del Ejecutivo de hacer “desaparecer el ministerio de la Mujer” para fusionarlo con el de Desarrollo, y las “múltiples agresiones” de parte de grupos conservadores del Congreso al ejercer presión y amenazas contra las defensoras de DDHH o contra las organizaciones feministas.
Manifestación en el Paseo de la Reforma, en la capital mexicana.
México, uno de los países del mundo con más violencia de género, sacudido a diario por el infierno feminicida, está gobernado desde hace cinco meses y por primera vez en la historia por una mujer, Claudia Sheinbaum. La de este sábado ha sido la primera gran marcha con Claudia Sheinbaum en la presidencia.
Los roces característicos de años anteriores, con la derecha en el Palacio Nacional, han perdido intensidad en los últimos 8 de marzo. Sheinbaum ha enarbolado uno de los mensajes con los que llegó al Gobierno, “Llegamos todas”, una llamada inclusiva, pese a las críticas de algunos colectivos, ninguno tan hiriente como el de los familiares de personas desaparecidas, tragedia que, de momento, el Gobierno no logra detener.
Una mujer pinta la estatua de Luis Carlos Galán, ex-ministro derechista, durante la marcha en Bogotá.
Las colombianas también se manifestaron en las principales ciudades del país bajo la consigna “¡Por el trabajo y la vida digna, avanzada feminista y resistencia colectiva!”. Y su presidente, Gustavo Petro, quien ha recibido múltiples apoyos pero también críticas, incluso de la vicepresidenta Francia Márquez, por decisiones y comportamientos casi machistas en el seno del Gobierno, ha lanzado desde las redes sociales un mensaje de apoyo a Sheinbaum.