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Caetano Veloso: "La esclavitud es una característica nacional de Brasil"
Presentó en febrero su último disco
"Sou seu sabiá" fue escrita por Caetano Veloso para que la grabara Marisa Monte. Es como una de esas típicas alabanzas tiernas de Caetano, con melodía dulcemente sinuosa. La peculiaridad es que el objeto de los elogios es la primera persona, quien canta, Marisa Monte o, ahora, el propio Caetano en su nuevo dc:* "Podés estar tristísimo en tu cuarto/ Que siempre tendré mi modo de consolarte/ Basta tener alma de oír/ Y corazón de escuchar/ Nunca me harto del unísono con la vida".
Quizá el éxito gigantesco de su disco Prenda minha influyó en ese estado de espíritu satisfecho y orgulloso de su propia misión. Aun vehiculizando una reflexión potencialmente deprimente como "La esclavitud permanecerá por mucho tiempo como la característica nacional de Brasil" ("Noites do norte") el enfoque musical está en "unísono con la vida". Caetano explota su veta tierna, plácida, lírica, descubriendo y revelando nuevas maneras de maravillarse con la existencia, con melodías lánguidas acolchonadas por un sabroso juego fonético. Estilísticamente, cualquiera de las músicas hubiera podido existir hace veinte años, en su fase con el grupo A Outra Banda da Terra (1976-1983). Ese fue el momento de concreción de la personalidad "definitiva" de Caetano, adonde se dirigen los frutos más automáticos y espontáneos de su creación cuando no media algún tipo de tensión evolutiva.
Muy distinto, en cambio, es el ropaje sonoro que reciben las composiciones, que es totalmente de ahora y prolonga, moderándolas, líneas de los trabajos más recientes: percusión presente y llamativa, toque retro pero con extrañamientos modernistas en los arreglos orquestales, exclusión de teclados y samples. Jaques Morelenbaum sigue teniendo una presencia importante en producción y arreglos, pero Caetano es el productor principal y la diferencia se nota: las bases ya no huelen tanto a cosa pensada sino que parecen haber sido encontradas en ensayos y pruebas, hay un trabajo más de grupo -aunque aquí es un grupo distinto en cada surco-
En Caetano aun las intenciones más suaves vienen siempre envueltas en espíritu de aventura formal y estímulo intelectual. El armado crea los siguientes núcleos temáticos: la esclavitud, homenajes personales -al músico Raul Seixas y al cineasta Michelangelo Antonioni, al héroe esclavo Zumbi y a través suyo al compositor Jorge Ben- animales (otro regreso a Bicho, de 1976), Rio de Janeiro y el yo de Caetano. "Zera a reza" es un ejemplo de "minimismo fonético" concretista, con sus pares de palabras que son anagrama una de la otra: "vela leva a seta tesa/ rema na maré/ rima mira a terça certa/ e zera a reza" ("vela lleva la saeta tiesa/ rema en la marea/ rima pone mira en el martes correcto/ y reduce a cero el rezo"). "Noites do norte" musicaliza un texto en prosa con un enganchado fluido de gestos de música "romántica" de la Epoca de Oro (la referencia estilística, aunque no coincida estrictamente con la época aludida, remite, con el signo de lo "viejo", al período del autor del texto, el pensador Joaquim Nabuco, muerto en 1910). "Michelangelo Antonioni", primera canción de Caetano escrita en italiano, es un contrapeso al disco anterior, dedicado a Fellini:** cada uno de los siete versos son un plano en un découpage de una escena que podía ser de Antonioni.
"Cantiga de boi" tiene una extrema complejidad conceptual y poética y el arreglo de Luiz Brasil explora una tímbrica muy particular. "Ia" tiene la candidez perezosa y casual de Dorival Caymmi procesada por poesía concreta y música disonante. "Tempestades solares" es un samba de morro expandido por giros melódicos y lingüísticos fuera de lo común y sobre todo por un canto afectado opuesto a los estándares de "virilidad rústica" del género.
Caetano no está abriendo un camino nuevo ni realizando uno de sus productos pico. Está agregando otra perlita brillante y perfecta a su obra inmensa.
Guilherme de Alencar Pinto
Brecha Uruguay, febrero del 2001.
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