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13-M: Lizarra ganó y Ermua perdió
Hay que insistir en que el resultado clave del 13M es que Euskal Herria ganó y España perdió. Hay que insistir en ello porque esa, la contradicción España/Euskal Herria, es la contradicción principal hoy en Euskal Herria Sur. Y porque precisamente estas elecciones habían sido planteadas por los españoles como un plebiscito para la "Reconquista española de las Vascongadas". Porque el Gobierno de España, con la ayuda del PSOE ligado al PP en una Unión Sagrada Española, había apostado todo y puesto en juego todas sus fuerzas para vencer al nacionalismo vasco, para desalojarlo del Gobierno de la C.A.V. "Ahora es posible", rezaba el eslogan del Partido Popular.
Por ello la victoria de los partidos nacionalistas vascos (PNV, EA y EH) el 13M es el dato clave. 53 de cada 100 votos. Un total de 747.361 votos de la suma PNVEA+EH (604.222 de PNVEA + 143.139 de EH) a los que hay que añadir los 663 votos de la candidatura ASKATASUNA para totalizar 748.024 votos nacionalistas vascos (el 52,89% del total) frente a la suma total de 666.248 votos (el 47,11%) de todas las sucursales de partidos españoles. Y 40 de los 75 escaños en juego.
Inmediatamente hay que añadir que esa victoria del nacionalismo vasco es la más importante de la historia del postfranquismo. Porque ha sido conseguida la vez en que más gente ha votado en la Comunidad Autónoma Vasca. Hasta ahora las sistemáticas victorias del nacionalismo vasco en las elecciones para el Parlamento de la C.A.V. eran también sistemáticamente minusvaloradas por los españoles con el argumento de que en esas elecciones "autonómicas" votaba menos gente que en las elecciones "españolas" para el Parlamento español. Con el argumento de que el nacionalismo vasco ganaba porque muchos españoles de la C.A.V. se abstenían. Ese argumento ha quedado anulado esta vez. Porque NUNCA antes había votado en la C.A.V. tanta gente como el 13M: 1.431.998 electores.
La suma PNV-EA-EH ha subido 64.403 votos sobre los 682.958 conseguidos en las anteriores elecciones para el Parlamento de la C.A.V. en octubre de 1998.
El segundo resultado clave del 13M es la victoria del Acuerdo de Lizarra sobre el Espíritu de Ermua. Es cierto que el Acuerdo de Lizarra-Garazi está congelado por la pusilánime actitud del PNV-EA y que incluso IU-EB ha retirado su firma. Pero hay que leer los resultados del 13M en función de los firmantes o no de ese Acuerdo porque el Gobierno de España (y el PSOE) habían planteado también estas elecciones como un plebiscito sobre el mismo. Sostenían que PNV-EA debían ser castigados en las urnas por haber firmado el Acuerdo de Lizarra. Y aunque IU-EB había retirado su firma pronosticaban también que sufriría una sangría de votos por haberla puesto.
Aún más. Sucede que los tres programas electorales de PNV-EA, EH e IU-EB presentados para el 13M por los firmantes de aquel Acuerdo incluían esta vez expresamente la reivindicación del Derecho de Autodeterminación para Euskal Herria (en el caso de EH concretada en la reivindicación de la independencia).
Pues bien, el Acuerdo de Lizarra ha vuelto a ganar al Espíritu de Ermua en la C.A.V. como lo hizo en las elecciones de 1998 y 1999. La suma de votos de PNVEA, EH e IU-EB subió el 13M a 826.223 (el 58,4%), 72.201 votos más que en 1998. Y 43 escaños de los 75. Los mismos que en 1998.
El tercer resultado clave del 13M es el fracaso rotundo de la Unión Sagrada Española PP-PSOE. Fracaso porque no ha conseguido, como pretendía, la mayoría absoluta de escaños (ha sumado 32 en vez de los 38 que hacen mayoría absoluta). Fracaso porque no ha conseguido, como pretendía, ganar en votos al conjunto de los nacionalistas vascos (su suma –580.128 votos- ha quedado 167.233 votos por debajo de la suma PNV-EA-EH y sus escaños 8 por debajo de los 40 de esos partidos nacionalistas vascos). Fracaso porque no ha conseguido, como pretendía, ni siquiera superar a PNV-EA ni en votos ni en escaños (su suma ha quedado 24.094 votos por debajo de los de PNV-EA y sus 32 escaños uno por debajo de los 33 de PNV.EA). Fracaso porque esa Unión Sagrada Española PP-PSOE no ha ganado ni un solo escaño sobre los 32 que en 1998 sumaban PP, PSOE y UA (ahora subsumida en el PP): el PP ha ganado uno respecto de los 18 de PP+UA del 98 pero el PSOE ha perdido uno de los 14 del 98.
Fracaso rotundo sobre todo porque toda la furiosa campaña española contra el nacionalismo vasco desencadenada durante más de un año, después de que en marzo del año 2000 el PP consiguiera mayoría absoluta en España, NO LE HA AÑADIDO NINGÚN VOTO A ESA UNIÓN SAGRADA ESPAÑOLA. Probablemente el dato más revelador sobre el fracaso español en la política vasca durante el período marzo 2000/mayo 2001 sea éste: hubo un AUMENTO de 304.950 votos a las candidaturas en la C.A.V. (un 27,5% de aumento) entre las generales del 2000 y el 13M Y SIN EMBARGO LA "UNIÓN SAGRADA ESPAÑOLA" PP-PSOE BAJÓ, PERDIÓ 9.690 VOTOS.
Ese ha sido el fruto, el logro, el "éxito" de catorce meses de feroz, cotidiana, insistente, abrumadora, masiva y continua campaña contra el nacionalismo vasco realizada por las televisiones, radios y periódicos españoles. Y del trabajo de los crecientemente nutridos rebaños de "intelectuales" y "pacifistas" españoles reclutados, entrenados y aprovisionados por el Ministerio de la Policía española. Y de las amenazas, declaraciones, chantajes, desplantes, incumplimientos de leyes y de acuerdos, acciones diplomáticas en todos los continentes y demás jugadas del Gobierno de España contra el PNV, Arzalluz y Egibar (además de contra ETA y contra el MLNV, por supuesto).
Conviene detallar que esa pérdida de 9.690 votos de la "UNIÓN SAGRADA ESPAÑOLA" PP-PSOE es un saldo. El saldo de 3.698 votos ganados por el PP y 13.388 votos perdidos por el PSE-PSOE. Y que, a su vez, los 3.698 votos ganados por el PP son también un saldo. El de los 7.228 votos ganados en Bizkaia (+4.134) y Gipuzkoa (+3.096) y los perdidos en Araba (-3.530). Precisamente en Araba, en el territorio desde el que Mayor Oreja se proponía exportar al resto de la C.A.V. el "modelo alavés" de felicidad lograda por el Gobierno PP-UA-PSOE en la diputación Foral.
Mayor Oreja y Aznar, Zapatero y Nicolás Redondo y los plumíferos y locutores televisivos y radiofónicos a su servicio intentan encubrir ese fracaso subrayando las subidas de votos del PP y PSOE en la C.A.V. de las elecciones al Parlamento de Gasteiz de 1998 a éstas del 13M del 2001. Subidas ciertas (59.452 votos el PP y 33.142 el PSOE) facilitadas por el aumento de 163.704 votos a las candidaturas entre ambas fechas. Pero al insistir en esas subidas ocultan y enmascaran el hecho decisivo de que YA SE HABÍAN PRODUCIDO EN EL 2000 y que en estos catorce meses HAN BAJADO de la cota entonces alcanzada. Que ha bajado el PSOE en la CAV, la suma PPPSOE en la CAV e incluso el PP en Araba.
Siendo este fracaso el hecho más relevante y el que, precisamente por ocultado a la opinión pública española más debe destacarse, es claro que igualmente relevante es la otra cara del mismo fenómeno. Es decir, la espectacular victoria y el récord histórico absoluto logrado por la coalición PNV-EA. Y el transvase de votos de EH que ha hecho posible si no tal victoria sí sus descomunales dimensiones.
Red Vasca Roja
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