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PROCESO BATASUNA. Ponente de Piztu:
Piztu valora su aportación desde el punto de vista de ofrecer un elemento para la reflexión. Uno de sus ponentes, Karmel Etxebarria, recuerda a Mikel Zuluaga, autor del documento y encarcelado por Garzón, y señala que «gracias a él Euskal Herria va a asumir con más fuerza la estrategia de la desobediencia civil». Su objetivo es la creación de un Estado democrático y socialista adecuado a la realidad de Euskal Herria y basado en un modelo federal.
¿Con que objetivo participa Piztu en el proceso Batasuna?
Piztu pretende ser una nueva concepción de la lucha política recogiendo aportaciones que se han venido dando por la experiencia de las últimas dos décadas de la unidad popular. En la ponencia se dice que uno de los errores más graves de una organización revolucionaria es que sea conservadora y aunque la coyuntura no sea muy favorable para los cambios, pensamos que hay que abrir las puertas de par en par, necesitamos nuevos aires, y, por eso, afirmamos que no basta con vencer, necesitamos convencer.
¿Es posible la unidad de la izquierda vasca tras el cambio que se ha producido en la situación política?
Es más complicado. No hemos elegido este momento, es lo que hay, pero pese a todo pensamos que se pueden dar pasos adelante. La organización de la que se tiene que dotar la renovada unidad popular debe ser un espejo y un reflejo de lo que queremos para la sociedad vasca a la que nos dirigimos. Si queremos una sociedad progresista, democrática, abierta y participativa, lo mismo queremos para nuestra organización.
¿Cuáles son los ejes fundamentales de la ponencia Piztu?
Por un lado, proponemos un modelo abertzale, porque la independencia de Euskal Herria es la única forma de garantizar su futuro. Además, la única posibilidad de ser dueños de nuestro destino y de hacer frente a la uniformidad que nos quieren imponer a través de la globalización económica, social y política es la que nos da una Euskal Herria libre e independiente. Por otro lado, defendemos el socialismo, porque es el único sistema que puede dar la vuelta a este capitalismo injusto, pero será un socialismo adecuado a la realidad de Euskal Herria, en el que profundizaremos desde la democracia. Al fin y al cabo, si llevamos la democracia al último extremo se convierte en socialismo. La democracia socialista vasca es nuestra meta, pero, al mismo tiempo, proponemos un modelo federal para Euskal Herria que tenga en cuenta la realidad específica de cada herrialde. Asimismo, planteamos un modelo organizativo democrático, de amplia participación social, que tenga en cuenta todas las iniciativas y organismos populares y en el que podamos construir nuestro futuro a través del respeto a la palabra y a la decisión de los ciudadanos.
La última operación dirigida por Garzón ha puesto de moda la desobediencia civil y el proyecto Piztu. ¿Cómo puede incidir en el debate y en el apoyo a esta ponencia?
En primer lugar, queremos recordar a Mikel Zuluaga, que es el autor principal de la ponencia. Su encarcelamiento es reflejo de la situación de falta de democracia que vivimos. Creemos que gracias a Garzón Euskal Herria asumirá con más fuerza la estrategia de la desobediencia civi, que proponemos como modelo de lucha que va a condicionar la estrategia de futuro y que se va a desarrollar en todos los ámbitos de la sociedad. No es una propuesta para una situación concreta. Por eso creemos que en esta nueva fase el instrumento de trabajo principal de la unidad popular debe ser la lucha de masas, que se fortalecerá y ampliará a través de la desobediencia civil. Pensamos que nuestra aportación más importante es, más que lograr un gran respaldo, ofrecer un elemento para la reflexión.
¿Qué cambios plantea Piztu con respecto a la estructura organizativa actual?
Por un lado, la formación del Congreso Nacional Vasco, que sería una especie de Parlamento en el que estarían representados todos los progresistas y abertzales de Euskal Herria. Por otro, con respecto a la bese, proponemos la creación de una nueva figura, la del lagun. Esta es la forma más sencilla de apoyo y militancia de la unidad popular. Es una persona que colabora, paga su cuota y va a las asambleas locales. En tercer lugar, proponemos la creación de los referéndumes internos, con una periodicidad semestral, para consultar sobre temas concretos a los lagun.
¿Qué deficiencias se constatan en la actual estructura?
Son más de práctica política que teórica. Para que la lucha de liberación avance es necesario que esa lucha, para la cual nuestro pueblo tiene mucho potencial, se dé de forma organizada. La propia organización permitirá, al mismo tiempo, avanzar en el campo de la lucha ideológica interior. Hay que organizar el potencial ideológico de los miembros de la izquierda abertzale para que nuestro proyecto político pueda ser mayoritario.
¿Cuál es el modelo político y social que defiende Piztu?
Una Euskal Herria independiente y un Estado socialista vasco. La independencia es la única manera de garantizar el futuro de Euskal Herria y nuestra propia nacionalidad. Además, el socialismo es el único sistema capaz de superar las injusticias del capitalismo y la globalización. Por eso defendemos un Estado democrático y socialista adecuado a la realidad vasca y un modelo federal.
¿Qué estrategias de lucha se plantean?
Estamos hablando de la refundación de la unidad popular. Para que ésta acumule las fuerzas necesarias para llegar a esos objetivos de los que hemos hablado planteamos la lucha de masas, y dentro de ella la desobediencia civil, pero sin olvidar la lucha institucional y la electoral. La interrelación complementaria y contradictoria de esas formas de lucha que tiene que desarrollar la unidad popular nos llevará a la acumulación de fuerzas para poder presentar un proyecto de futuro para Euskal Herria. El que desconfía de otras formas de lucha puede ver la necesidad de apostar por la desobediencia civil. Además, son importantes las alianzas para aunar fuerzas y, en este sentido, nos parece muy importante la experiencia de Lizarra-Garazi. Es en esa línea en la que hay que trabajar.
¿Es necesario un cambio de estrategia de la izquierda abertzale?
Nuestra ponencia es sobre el modelo organizativo, pero si las líneas maestras de nuestra ponencia se recogiesen, sobre todo el tema de las formas de lucha, vendría un cambio de estrategia, al menos alguna readecuación.
Mirari ISASI, noviembre´00
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La Haine
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