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Nafarroa: ayer, hoy y mañana
x Zuriñe
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Para algunos es vital que el pueblo pierda
la memoria histórica, porque así pueden ocultar sus crímenes
del pasado y repetirlos en el presente. Pero la izquierda abertzale ha sabido
siempre llevar con orgullo el testigo de las luchas que en nuestro pueblo
y en el mundo se han llevado a cabo por la dignidad y la libertad del ser
humano.
Cuando a partir del 18 de julio de 1936 la losa de la represión
cayó sobre las izquierdas y los nacionalistas vascos, a fuerza
de cunetas repletas de cadáveres, pelos cortados al cero, aceite
de ricino y golpes por hablar en euskara se truncaron las esperanzas de
progreso, y se construyó un muro de silencio que duró años.
Pero no tantos como los franquistas hubieran querido. De las cenizas
de la ilusión pisoteada surgieron nuevas generaciones de luchadores,
en las fábricas, en los centros de estudio, en la calle. Gente
que frente a la sumisión y el conformismo se atrevió a alzar
la voz, y el puño, y este pueblo parió nuevas consignas
de lucha, organizaciones, comisiones obreras, ikastolas, canciones de
protesta, asociaciones de vecinos, feministas, juveniles... y la fiera
tuvo que reconocer que a pesar de toda su crueldad, al calor de los fuegos
de tantas cocinas las ascuas escondidas bajo las cenizas se habían
conservado vivas y habían prendido de nuevo.
No se trataba de llorar lo perdido, sino de apostar por otro futuro,
y a pesar de los riesgos hubo mucha gente que lo puso todo, hasta la vida,
en esta nueva batalla. Y volvió la bota a reprimir, y de nuevo
se persiguió y calumnió a la gente rebelde, y llegó
la cárcel, y el exilio, y la tortura se agudizó, y llegaron
los guerrilleros de Cristo Rey, y la guerra sucia hizo verter mucha sangre.
Pero algo muy importante había cambiado, y por eso ni detenciones
ni penas de muerte pararon el combate. Ni siquiera la apatía o
el desprecio de los que criticaban el franquismo pero no estaban dispuestos
a enfrentarse a él evitaron que la llama prendiera.
Y Carrero voló, y voló y voló. Y los franquistas,
que ya estaban encargando nuevos trajes para vestirse de demócratas
comprendieron que habían fracasado, y que al norte del Ebro había
un pueblo que no se había hecho franquista, que quería ser
libre y que había abrazado la causa de los pobres de la tierra.
Un pueblo que se estaba haciendo tan grande que no lo podían contener
ni Amadeo ni su perro, ni los otros perros uniformados de día y
de noche incontrolados , ni el OPUS, ni los caciques. Supieron que lo
que habían hecho con Gernika había sido insuficiente, porque
los supervivientes trasmitieron a sus descendientes el anhelo de una Euskal
Herria libre y soberana.
Orain sinestarazi nahi digute estatuan frankista bakarra zegoela,
Franco bera alegia. Baina diktadorea ohean hil zen. Eta ondorengo estatuburua
berak izendatutako Borboia izan zen. Horrela hasi zen transizioa.
Los viejos ministros, funcionarios, policías, periodistas y jueces
del régimen siguieron en sus puestos. Y organizaron nuevos partidos
como la UCD o AP. Y se celebraron elecciones que ellos mismos ganaron.
Y los cuneteros navarros se agarraron al fuero para esconderse tras él
y hacer olvidar así su pasado. Y llegó la Constitución,
y el Estatuto de la Moncloa dividió a los vascos del sur sin consultarnos.
Y una casta de reaccionarios, con la ayuda de antiguos izquierdistas se
inventó un Amejoramiento que no mejoraba nada, y que ataba Navarra
a los mismos caciques o a sus hijos modernos y pijitos, que no es lo mismo
pero es igual.
Pero nunca habrían podido esconder 40 años de infamia con
tanta facilidad si no fuera porque otros, que se decían de izquierdas,
comunistas, o socialistas o marxistas leninistas, que de todo hubo, les
ayudaron a dejar atrás el abismo. Y les lavaron la cara, y los
hicieron demócratas de toda la vida. Dijeron que era porque había
que cerrar las heridas del 36, o porque había que evitar que los
militares se enfadaran o porque eran tiempos de libertad sin ira. Y en
las tumbas de muchos fusilados se estremecieron los huesos. Y su memoria
se convirtió para el PSOE y la UGT en mera moneda de cambio y reclamo
electoral. Y todos, los que se mancharon la mano en el franquismo, los
que habían estado viendo la tragedia desde la barrera y hasta algunos
que llevaban la hoz y el martillo en la solapa decidieron que el nuevo
enemigo era la izquierda abertzale, los terroristas. Navarra
dejó de ser vasca para ellos y escondieron las fotos en las que
portaban pancartas que hablaban de autodeterminación.
Y los Iturbes se hicieron trajes a medida. Y crecieron los partidos que
nadie había visto en las barricadas. Y algunos se escabulleron
en busca de un futuro personal mejor. En la Moncloa se habían pactado
las renuncias de unos sindicatos burocratizados dispuestos a tragarlo
todo. Y vinieron nuevas medidas represivas, y más guerra sucia,
y reestructuraciones, y despidos. Y perdidos los primeros disimulos, volvió
a atacarse al euskara y a regalar terrenos al OPUS, y a engordar los bolsillos
de constructores y corruptos. Y el primer gobierno que osó llamarse
a sí mismo vasco tras la muerte del Caudillo fue presidido por
un navarro al que no parecía importarle que su tierra quedara fuera
del proyecto.
El PSOE llegó al gobierno, en Madrid, y en Iruñea. Y mucha
gente creyó que las víctimas del 36 habían al fin
ganado. Pero no tardaron en comprender que era como si las fusilaran otra
vez. Los nuevos socialistas eran más banqueros que obreros, y más
guardias civiles que defensores del los derechos humanos, y más
españolistas que la derecha de siempre. Las medidas económicas,
la corrupción, los Gal y la dispersión de presos políticos
dieron la talla de los nuevos gobernantes. Y los Urralburus, Victor Manueles
Arbeloas y demás hicieron de su capa un sayo que intentaron llenar
de monedas. Algunos con tan poco disimulo que pasarían de la poltrona
el banquillo de los chorizos.
Haiendako etsaia ezker abertzalea zen. Euskadiko Ezkerraz ere baliatu
ziren zatiketa eragin eta herriaren borroka ahultzeko. Euskal ardi beltzak
espainiar bordara eramateko. Baina denboraren poderioz nor bere lekuan
agertu zen.
Y seguía la confrontación. Y seguía la obstinación
en no negociar ni buscar soluciones políticas. Y la izquierda abertzale
se fue fortaleciendo y tuvo mejores y peores resultados electorales, grandes
errores y grandes aciertos, pero llegó a pueblos y barrios, entró
en parlamentos y ayuntamientos, y allí donde estaba se notaba.
Impedía el compadreo mafioso de los demás y defendía
la democracia participativa. Y molestaba porque era un testigo incómodo.
Que se lo pregunten a Urralburu.
Iritsi zen Argeleko negoziaketa, zeinean espainiar estatuak euskaldunak
engainatu izan nahi zituen. Izan ere, GAL talde terrorista antolatu zuten
berberak mintzatzen ziren pakeaz.
Y el sufrimiento siguió, y la cárcel, y la tortura, y el
aislamiento, y el pacto por la paz y la tolerancia, y el despido cada
vez más fácil, y las condiciones de trabajo peores, y Navarra
seguía siendo un coto privado de la derecha más reaccionaria,
tanto que ni abortar en los escasos casos recogidos por la ley se permitía.
Y pese a haber dicho no a la Otan seguían las Bardenas convertidas
en polígono de tiro. Pero la juventud vasca se hizo insumisa, y
Navarra batió todos los records. Y la autovía, el pantano
de Itoiz, y tantos otros proyectos tuvieron enfrente a una sociedad madura,
activa, movilizada.
Poco quedaba ya de las ilusiones de los tiempos de la muerte de Franco.
Los gobiernos del PSOE habían extendido la frustración,
y habían difuminado tanto la frontera entre izquierda y derecha
que los viejos franquistas podían ya volver a tener el poder en
sus manos sin disimulos. Y Aznar llegó así a la Moncloa.
El PSOE se iba, y aunque había hecho sufrir a tanta gente, como
Franco y la UCD, dejaban el gobierno sin haber puesto el cascabel al gato
vasco.
Bibotedunak Moncloako giltzak eskuratu bezain laster ezker abertzalearen
aurkako neurri berriak iragarri zituen. PSOEk ibilitako bidetik jarraituz,
garbi esan zuten Ppkoek helburua ezker abertzale osoa kriminalizatzea
zela.
La izquierda abertzale planteó nuevas propuestas para Euskal Herria.
La alternativa democrática se conoció en Euskal Herria a
golpe de video y persecución policial. La idea era clara, Euskal
Herria debe tener la palabra y decidir. Pero además de clara era
sumamente incoveniente para los estados empeñados en evitar que
las gentes de este país podamos decidir libremente. Y encarcelaron
a la Mesa Nacional de Herri Batasuna, y cerraron Egin y Egin Irratia,
y se comenzaron a poner de moda las redadas contra militantes de KAS,
de Ekin, de Jarrai, de fundaciones, movimientos populares o cualquier
organismo popular insumiso.
Leloa beti berdina zen: Etarekiko lotura. Dena ETA da espainiar eta
frantziar agintariendako.
Y mucha gente que no compartía las ideas de la izquierda abertzale
puso sus barbas a remojar. Y hasta algunos partidos y sindicatos comenzaron
a replantearse viejas posturas. La agresión era tan fuerte, y tan
desvergonzada que hasta los más tibios comprendieron que el objetivo
era acabar con todo aquel que no se sometiera al guión.
Eta indarrak biltzen joan ziren, poliki-poliki, baina urrats sendoak
emanez. Errepresioak Euskal Herriaren pasibitatea nahi zuen, baina izugarrizko
erantzuna jaso zuen. Aurretik LAB eta ELAk landuta zuten bidea indartu
zen, baita fruituak ematen hasi ere.
La respuesta de este país se llamó Lizarra-Garazi, y vino
acompañada de un largo alto el fuego de ETA. Y las ilusiones se
encendieron como nunca. Y surgió Udalbiltza. Y el PNV se distanció
de sus viejos aliados como el PSOE. Se estaba demostrando que la unión
de fuerzas ofrecía unas posibilidades extraordinarias para traer
la democracia a este país. Y la Herri Batasuna que estuvieron ya
en ese momento a punto de ilegalizar apostó por crear una plataforma
más amplia con otros sectores, Euskal Herritarrok, que obtuvo maravillosos
resultados electorales.
Eta Parisen zein Madrilen alarma argi guziak piztu ziren. Euskalduna
badoaz! Ulertu zuten abian zegoela Europako herririk zaharrena. Zerbait
egin behar zuten bidea oztopatzeko eta hortan aritu ziren gogotik.
Pero el proyecto no pudo madurar. Por encima de las expectitivas de grandes
avances se pusieron intereses de partido y el miedo a desafiar a los estados
hizo que no se pasara de las palabras a los hechos. Y el PNV y otros agentes
prefirieron no correr riesgos y de nuevo marcaron distancias. Y las iniciativas
puestas en marcha se fueron oxidando. Y terminó la tregua, y el
partido que más podía haber hecho por alargarla y menos
había hecho se presentó de nuevo en el medio. Ni con unos
ni con otros, pero al final al lado del poderoso frente al rebelde.
Eta batzuk Euskal Herritarroken ontzia utzi zuten. Eta Batasuna prozesua
abian jarri zenean, zatiketa gorpuztu zen, hainbatek beste alderdi bat,
akaso beste Euskadiko Ezkerra bat antolatzeko. Halere erakunde berria
sortu zen, lehen aldiz Euskal Herria osoan hedatutako erakundea: Batasuna.
La espiral represiva se desató, y siguieron las ilegalizaciones
y detenciones. Y los siguientes resultados electorales fueron muy duros
para la gente combativa. Y la bestia fue atreviéndose a formular
su nuevo objetivo: ilegalizar Batasuna. Y el PNV buscó nuevas alianzas
con el PSOE, y hasta algunos empezaron a pensar en cómo repartirse
el pastel de la base social de la izquierda abertzale.
Y así llega el momento de cambiar de tiempo verbal, porque estamos
en el presente. Ya está en camino la ley para ilegalizar Batasuna.
Pero lejos de asustarnos, seguimos con nuestra actividad y con nuestras
propuestas.
La continuación de este relato la escribiremos entre todos y todas.
Y tendrá el rumbo que seamos capaces de darle.
Baina aurrera jarraituko dugu. Euskal Herriak sortarazi baitzuen ezker
abertzalea, eta oraingoz ere behar duelako...
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