Madrid. Los organizadores del Foro Social Trasatlántico nos brindan a los que luchamos contra este sistema la oportunidad de llevar una vez más el enfrentamiento ideológico a un plano físico violento en el recorrido de la manifestación del día sábado 18 con salida en el metro Ciudad Líneal (10h), y de evidenciar una vez más la polarización entre los que defienden el mundo tal y como está y los que intentamos transformarlo. Marcharemos hacia la Cumbre de jefes de estado sin ánimo de que sus reuniones se desarrollen de manera tranquila.

El día 18 salgamos a la calle a seguir golpeando los cimientos de los opresores del mundo mediante la fomación de bloques de choque, que además de seguir destruyendo los símbolos más tangibles de las grandes corporaciones, que no son otros que sus mismas sucursales bancarias, cajeros automáticos o cabinas telefónicas, enfrenten a los símbolos de los estados que las amparan y ayudan que es, entre otros, el mismo cuerpo policial.

Los que defienden la ley y el orden como base para la continuidad de la injusticia social contra los que como antítesis promovemos la desobediencia y los disturbios por un mundo mejor.

Un paso necesario hacia la localización de blancos estratégicos estructurales sobre los que se ostenta el orden mundial. Más allá de la obligatoria destrucción de sucursales y cabinas hacia la necesaria retirada de sus guardaespaldas.

Los jefes del imperio europeo y sus serviles genocidas latinoamericanos, deben saber que en Madrid hay mucha gente que les odia.

Ver la "Crítica a la Formación para la Paz" en el ámbito educativo, de Claudio Velázquez.